TEMPE, Arizona EEUU (AP) — El regreso de DeAndre Hopkins ayudó evidentemente a los Cardinals de Arizona.
Las dos intercepciones devueltas hasta la anotación fueron incluso más importantes.
El resultado fue una victoria por 42-34 sobre los Saints de Nueva Orleans el jueves por la noche, algo que los Cardinals necesitaban para mantener el paso en la División Oeste de la Conferencia Nacional.
Los Cardinals (3-4) no pueden esperar que se repitan las actuaciones de Marco Wilson e Isaiah Simmons. Cada uno consiguió una anotación después de interceptar un pase en la recta final de la primera mitad para convertir un partido cerrado en una cómoda ventaja.
Pero mientras se mantenga sano, Hopkins debería ayudar en los próximos 10 partidos. Se trata de un jugador capaz de cambiar un encuentro para los Cardinals, que se vieron mucho más competentes en la ofensiva cuando el tres veces All-Pro concentró la atención de la defensiva de los Saints.
“Es tan talentoso como siempre”, dijo el quarterback Kyler Murray. “Simplemente tenerlo en el campo fue bueno. No se le vio con óxido. Se lo hubiera sacudido si lo hubiera tenido. Su comunicación, su sentir por el deporte, no puedes ponerle precio a eso”.
Hopkins atrapó 10 pases para 103 yardas en su debut en la temporada. El veterano de 30 años se perdió los primeros seis partidos al estar suspendido por violar la política de la NFL sobre uso de sustancias prohibidas.
Y Hopkins no fue sólo un gran receptor el jueves, también fue un pacificador. Se interpuso en una discusión entre el coach Kliff Kingsbury y Murray en la parte final de la primera mitad.
Hopkins no divulgó qué fue lo que se dijo, pero señaló que esa es la señal de un equipo ganador.
“Ambos quieren ganar y me encanta ver eso”, dijo Hopkins. “Me encanta ser parte de un equipo en el que dos personas están dedicadas y enfocadas en ganar y obviamente va a haber roces.
“No estoy casado, pero por lo que he escuchado, así es el matrimonio”, agregó Hopkins con una sonrisa.
Receptor élite. Consejero matrimonial. Hopkins puede hacerlo todo.
Ahora los Cardinals se ven como un equipo más peligroso, de cara a la segunda mitad de la temporada.
QUÉ FUNCIONA
La defensiva permitió cerca de 500 yardas, lo que no es ideal, pero no se pueden ignorar las grandes jugadas de Wilson y Simmons, dos jugadores jóvenes que están en su segunda y tercera temporada en la liga. Ello hace ver a la oficina principal de Arizona muy inteligente.
QUÉ FALTA
Los Cardinals siguen sin conseguir una anotación en el primer cuarto de un partido de esta temporada. En ese periodo, han sido superados por sus rivales 48-6. Arizona ha remontado para conseguir tres victorias, pero su pobre desempeño en sus arranques de partido sigue siendo un problema.