El Giro de Italia finalizará en 2023 en Roma, con la etapa que se disputará el 28 de mayo, cinco años después de su último paso por la capital italiana, que fue muy agitado, anunciaron este lunes los organizadores de esta carrera ciclista.
Las 21 etapas de la 106ª edición del Giro, que arrancará el 6 de mayo con una contrarreloj en la región de los Abruzos (centro-este), tendrá siete etapas montañosas, con otras tantas llegadas en alto, con un desnivel positivo global de 51.300 metros, según el trazado desvelado este lunes.
Los especialistas de la lucha contra el crono tendrán tres oportunidades para brillar: la primera (18,4 kilómetros) en los Abruzos, con una pequeña subida al final; la 9ª, con 33,6 km de recorrido llano en Cesena (Emilia-Romaña); y la 20ª, en la víspera del final, una cronoescalada de 18,6 km, de los que 7,5 km corresponden al ascenso al Monte Lussari. con una pendiente media del 12% de media.
Estos más de 70 km totales de lucha contra el crono es algo que no se veía en el Giro en la última década (75,4 km en 2013) y podría actuar de reclamo para el belga Remco Evenepoel, vencedor de la última Vuelta a España y una de las estrellas esperadas en el próximo Giro.
La última edición de la carrera acabó en Verona con la victoria final del australiano Jai Hindley (Bora-Hansgrohe).
El próximo año, la carrera acabará en Roma, en los Foros imperiales.
El último paso del pelotón por la capital italiana (en 2018) dejó un sabor amargo entre los ciclistas.
Pese al decorado majestuoso, la etapa tuvo que recortarse debido a defectos en el asfaltado, con baches y agujeros en las calles romanas.
Los ciclistas, invocando razones de seguridad, lograron que los tiempos se neutralizasen a 80 km de la meta en la etapa final.
Los favoritos, entre ellos el británico Chris Froome, ganador de la general en esa edición, levantaron el pie del pedal y dejaron la lucha solo para los equipos con velocistas.
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