NUEVA YORK (AP) — Venezuela condenó el sábado en Naciones Unidas lo que describió como las “provocaciones militares y sanciones económicas injerencistas” de Occidente contra Rusia, ya que escalan la tensión y el conflicto.
En su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, el canciller venezolano Carlos Faría leyó una carta del presidente Nicolás Maduro, en la que también denunció “la campaña de odio desatada en detrimento del pueblo eslavo,” ya que "lejos de sumar a la paz, azuzan el fuego y la guerra."
“La humanidad no sobrevivirá a una guerra mundial, por tanto, a nadie conviene una escalada bélica en ninguna parte del mundo,” leyó el ministro de relaciones exteriores.
En respuesta a la orden del presidente ruso Vladimir Putin de enviar más tropas a Ucrania, varios líderes mundiales han contraatacado con acciones no militares con la esperanza de evitar una guerra abierta en Europa. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha impuesto sanciones financieras a Rusia que afectan a instituciones financieras y a oligarcas rusos.
Faría dijo el sábado que el conflicto entre Rusia y Ucrania ha agravado la situación de la seguridad alimentaria y de los suministros de “manera dramática.”
“Independientemente de las posturas ideológicas debemos convenir en la necesidad de priorizar el restablecimiento del camino diplomático, del diálogo político, por encima del enfrentamiento militar,” leyó el ministro.
Faría dijo que Venezuela apoya la propuesta que México presentó esta semana en la ONU de un plan de mediación para poner fin al conflicto entre Ucrania y Rusia.
México propuso formalmente ante el Consejo de Seguridad que éste, la India y el Vaticano encabecen una negociación en busca de una tregua entre Rusia y Ucrania. El canciller mexicano Marcelo Ebrard presentó la propuesta a sus homólogos ucraniano y ruso esta semana en Nueva York.
Por otro lado, en la carta abierta de Maduro que leyó Faría también se denunció una “perniciosa campaña mundial de descrédito y estigmatización” contra Venezuela por el hecho de “desafiar” al "régimen de pensamiento único que se impuso al mundo bajo la máscara de la economía de mercado y la globalización neoliberal."
La carta de Maduro también hizo referencia a la ola de migrantes venezolanos que salen de su país. Muchos de ellos han llegado a Estados Unidos en los últimos meses.
“Preguntamos a los organismos multilaterales, ¿dónde han ido a parar los millonarios recursos supuestamente destinados a apoyar a los migrantes venezolanos?”, leyó Faría. “Sería útil una rendición de cuentas para despejar las opacidades con las que se ha llevado a cabo tales asignaciones.”
Esta semana se hizo público un informe de una misión investigadora sobre Venezuela, comisionada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que dijo que Maduro ordenó personalmente la detención de opositores y críticos a su gobierno que fueron sometidos a descargas eléctricas, golpizas, asfixias y otros tratos crueles estando bajo custodia. El gobierno de Maduro no ha respondido de momento a las acusaciones del informe aunque se espera que lo haga en Ginebra durante la sesión del Consejo.