CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Unas 2.685 personas que estaban detenidas por delitos menores y que padecen enfermedades crónicas y degenerativas fueron excarceladas en el marco de una ley de amnistía, informó el jueves el gobierno mexicano.
Al anunciar las liberaciones, la secretaria de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, indicó que entre los excarcelados figuran personas que “no han cometido delitos graves o relacionados con violencia, gente humilde que no pudo pagar un abogado, tener un traductor o ha enfrentado todo tipo de adversidades”.
Durante la conferencia presidencial matutina Rodríguez dijo que entre los beneficiados están 123 mujeres, 120 adultos mayores, 208 personas con enfermedades crónico-degenerativas, 51 indígenas, 15 extranjeros. Asimismo, la funcionaria informó que hay otras 2.032 personas que cumplieron con los requisitos legales para libertades anticipadas.
Rodríguez consideró las medidas como un “acto de justicia”, y aseguró que los beneficiados “vivieron discriminación, enfrentaron la pobreza en sus comunidades y no tuvieron oportunidades de desarrollo o no contaron con una defensa adecuada”.
Con la Ley de Amnistía, que entró en vigencia en abril de 2020, se han liberado 136 personas de las cuales 66 estaban en condición de pobreza, 42 eran mujeres, 21 indígenas, dos con discapacidad permanente, cuatro víctimas de intimidación y una víctima de discriminación, precisó la secretaria de Seguridad.
En México hay 323 centros de reclusión con capacidad para 221.000 internos, pero la población penal es de unas 223.416 personas, según las autoridades. Los incidentes violentos en las cárceles mexicanas son comunes. Los analistas estiman que la situación de violencia en las cárceles son consecuencia del hacinamiento, el crecimiento de la población penal y el escaso personal de custodia, muchos de los cuales tienen bajos salarios lo que favorece la corrupción, según las autoridades.