WASHINGTON (AP) — Un plan largamente retrasado para desmantelar la Interestatal 375, una autopista de una milla (1,6 kilómetros) en Detroit que se construyó demoliendo barrios negros hace 60 años, fue uno de los grandes ganadores de fondos federales el jueves, la primera subvención del gobierno del presidente Joe Biden concedida para derribar una vía que causó segregación racial.
Se asignaron 104,6 millones de dólares que forman parte de los 1.500 millones de dólares en subvenciones al transporte entregados a 26 proyectos en todo Estados Unidos gracias al aumento de fondos de la ley bipartidista de 2021 para infraestructura.
La asignación permite que Michigan avance en sus esfuerzos de 270 millones de dólares para transformar el tramo de Detroit en un bulevar a nivel de calle, reconectando los vecindarios circundantes y agregando servicios, como carriles para bicicletas.
El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, ha dicho que hará de la justicia racial una prioridad en las asignaciones de fondos de su agencia, prometiendo una amplia ayuda a las comunidades. Dos de los barrios predominantemente afroestadounidenses de la ciudad, Black Bottom y Paradise Valley, fueron arrasados en la década de 1950 como parte de la creación de un sistema de carreteras interestatales, lo que provocó el desplazamiento de 100.000 residentes negros y erigió una barrera de décadas entre el centro de la urbe y las comunidades al este.
Los fondos federales, aclamados por líderes municipales y estatales como una forma de ayudar a rectificar un error racial del pasado, representa un primer paso clave que, según grupos promotores de la justicia racial, inspirará decenas de esfuerzos para desmantelar carreteras similares en otras ciudades.
Aun así, los defensores advirtieron que el plan de Michigan para construir un bulevar de seis carriles en la ciudad corre el riesgo de reemplazar simplemente una vía concurrida por otra.
Entretanto, a algunos residentes negros les preocupa que el nuevo desarrollo comercial y los brillantes edificios de condominios que prometen enlaces directos con el centro de la ciudad signifique una expulsión a largo plazo de la ciudad, debido a la prevista alza de los precios.