ORLANDO, Florida, EE.UU. (AP) — La presidenta de una filial en Florida de la Asociación Nacional para el Progreso de la Gente de Color (NAACP) renunció a su cargo, diciendo que como mujer del sur asiático sufrió “marginalización racista” de otros miembros de ese grupo defensor de los derechos civiles.
La doctora Vanessa Toolsie, vicepresidenta electa de la filial en el condado de Orange, se convirtió en su lideresa en marzo, cuando Tiffany Hugues renunció para presentarse a elecciones legislativas en el estado.
Nacida en Trinidad y de ascendencia india, Toolsie colocó una larga carta de renuncia en Facebook el domingo y después la reemplazó con una declaración breve en la que dijo: “NO voy a tolerar más racismo contra mí por ser una mujer de color orgullosa de ascendencia surasiática y caribeña”, reportó el diario Orlando Sentinel.
“El hecho de que sistemáticamente se me ha hecho sufrir ese racismo odioso en espacios antirracistas es aborreciblemente vergonzoso y que se sepa de ahora en adelante que yo tengo cero tolerancias ante más racismo contra mí o cualquier otra persona”, escribió, diciendo que dará más detalles.
Toolsie leyó su carta de renuncia durante una reunión virtual de la junta local de la NAACP el lunes por la noche. Una persona objetó, diciendo que se trataba de “acusaciones falsas contra el comité ejecutivo”, reportó el periódico. Otros preguntaron en el chat si Toolsie tenía prueba alguna y qué podía hacerse para garantizar que nadie más sufriera una experiencia así. La reunión concluyó sin más discusión.
“Estoy preocupado por esa persona y las acusaciones hechas”, afirmó John Cummings, portavoz del grupo, en comentarios al Sentinel. “No queremos ignorar ni deshumanizar ni, de ninguna forma, causar problemas ni preocupaciones a nadie, intencional o no intencionalmente”.
Toolsie acusó a un miembro de la junta ejecutiva del grupo de intentar excluirla de la gala anual de la organización, ignorar sus correos electrónicos e dejar intencionalmente de enviarle anuncios precisos y a tiempo sobre reuniones, en un intento malicioso para sabotearla y obstaculizar su eficacia, dijo el periódico.
“He tratado de resolver esto internamente durante meses, pero mis superiores no tomaron medidas para frenar el hostigamiento ni la marginalización racista antes del anuncio de mi renuncia”, escribió Toolsie. Añadió que sería “hipócrita” de parte de ella continuar como presidenta de una organización que está “contra el racismo y la opresión mientras sigo siendo tratada con una desigualdad tan desproporcionada, maliciosamente oprimida por el racismo”.