LIMA (AP) — El Congreso peruano negó el jueves un pedido del mandatario Pedro Castillo para viajar a Colombia y asistir a la toma de mando del nuevo presidente de ese país, Gustavo Petro.
Con 67 votos en contra del permiso, 42 a favor y cinco abstenciones, el Parlamento peruano rechazó la solicitud de Castillo para salir del país entre el viernes y el lunes con el argumento de que el mandatario tiene cinco investigaciones fiscales en contra, la mayoría por presunta corrupción.
La ley peruana ordena que el Parlamento decida si autoriza o niega a un presidente la posibilidad de salir del país. Castillo no se ha pronunciado tras el rechazo a su solicitud de viaje.
La legisladora del partido opositor Avanza País, Adriana Tudela, dijo que existe un potencial peligro de fuga si Castillo viaja debido a que existen indicios de corrupción “abrumadores y abundantes”. Indicó que en su reemplazo puede ir el canciller César Landa.
La parlamentaria Flor Pablo, del partido opositor Identidad y Desarrollo, indicó que en este momento Perú no tiene primer ministro, luego que el miércoles renunció Aníbal Torres a ese cargo y por lo tanto no se están tomando decisiones de gobierno que deberían ser “la prioridad”.
Por el contrario, una legisladora cercana al gobierno, Katy Ugarte, del Bloque Magisterial, indicó que el presidente jamás se fugaría y pidió no dejarse llevar por el odio y así evitar un ridículo a nivel internacional.
El último presidente peruano que salió del país y no regresó fue Alberto Fujimori (1990-2000). El exgobernante viajó a Brunei en noviembre de 2000 en medio de un fuerte escándalo de corrupción para asisitir al Foro de Cooperación Económica de Asia Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) y luego se dirigió a Tokio desde donde renunció. El Congreso lo destituyó luego por incapacidad moral.
Ahora Fujimori, de 84 años, cumple una sentencia de 25 años de cárcel por asesinato y corrupción en una cárcel de Lima. El exmandatario retornó sorprevisamente en 2005 a Chile donde fue detenido y extraditado a Perú en 2007, luego fue condenado por tribunales peruanos en 2009.
Castillo niega todas las acusaciones en su contra, pero la Fiscal General trabaja una hipótesis de que el mandatario es el líder de una organización criminal que obtenía dinero de licitaciones de obras públicas. El miércoles su primer ministro Aníbal Torres renunció y el mandatario dijo más temprano que su quinto gabinete ministerial, en 13 meses de gestión, será de “ancha base”.
Castillo es impopular en Perú, pero el Parlamento lo es aún más, según todas las encuestas. El mandatario alcanza 74% de desaprobación, mientras el Congreso 79%, de acuerdo a un sondeo de julio de la firma Ipsos Perú.
Castillo inició su gestión hace un año, pero el Parlamento ha intentado destituirlo en dos ocasiones sin lograrlo. Su gestión está programada para terminar en 2026.