AUSTIN, Texas, EE.UU. (AP) — El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha dicho que se presentó en un acto de recaudación de fondos de campaña horas después de la masacre en la escuela primaria de Uvalde y que le “hizo saber a la gente” que no podía quedarse, pero un periódico reportó que estuvo allí durante casi tres horas.
El diario Dallas Morning News publicó el jueves que los reportes de financiamiento de campaña y los registros de seguimiento de vuelos muestran que Abbott llegó a Huntsville a las 4:52 de la tarde del 24 de mayo —horas después del tiroteo en la escuela primaria Robb— y que luego fue llevado a la casa de un simpatizante local a unos 3 kilómetros (2 millas). No abandonó la ciudad hasta las 7:47 p.m.
El autor de la matanza entró en la escuela a las 11:33 de la mañana de ese día, pero no fue sino hasta las 12:50 de la tarde cuando la policía irrumpió en el aula en la que estaba atrincherado y lo mató.
El director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, el coronel Steve McCraw, calificó la respuesta policial como un “rotundo fracaso”.
McCraw afirmó que tres minutos después de que el atacante entró en la escuela, había suficientes policías armados para detenerlo. Diecinueve niños y dos maestras murieron en el ataque.
Cuando le preguntaron a Abbott durante una conferencia de prensa en Uvalde el día después del tiroteo por qué no había cancelado el acto de recaudación de fondos, señaló que estaba en Abilene cuando se enteró del ataque.
“En el camino de vuelta a Austin, me detuve y le hice saber a la gente que no podía quedarme, que me tenía que ir”, afirmó Abbott. “Y quería que supieran lo que había pasado y regresar a Austin para poder seguir colaborando con la policía de Texas y asegurarme de que se cubrían todas las necesidades aquí en la zona de Uvalde”.
La ciudad de Abilene, donde Abbott había dado una conferencia de prensa sobre los incendios forestales, está a unos 350 kilómetros (220 millas) al noroeste de Austin, mientras que Huntsville está a unos 240 kilómetros (150 millas) al este.
La vocera de la campaña de Abbott, Renae Eze, declaró al periódico que Abbott había sido sincero sobre sus movimientos ese día. Dijo que a lo largo de la tarde y la noche del 24 de mayo, Abbott habló con el presidente Joe Biden, con el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, con las autoridades policiales y con el personal.
“El día después de la tragedia, el gobernador viajó a Uvalde y se reunió con agentes policiales y funcionarios locales”, dijo. “La descripción que hace el gobernador de sus movimientos ese día es exacta”.
Al día siguiente del tiroteo, Abbott elogió lo que, según él, fue una respuesta rápida por parte de la policía, que “mostró un valor increíble al avanzar hacia donde estaban los disparos”. Más tarde dijo que había sido “engañado” y que estaba “furioso” por ello.
De acuerdo con un informe sobre la financiación de la campaña, Abbott pudo haber recaudado hasta 50.000 dólares en el evento de Huntsville, reportó el periódico.
Abbott, un republicano, se enfrentará a su oponente demócrata Beto O’Rourke en los comicios de noviembre.