Las publicaciones semanales de Cristiano Ronaldo en redes sociales en estas vacaciones usualmente lo muestran semidesnudo y musculoso, ya sea entrenando o promocionando alguna de sus muchas marcas.
Mantenerse relevante y visible es claramente importante para el jugador que, junto a Lionel Messi, es el mejor de su generación. Incluso en los últimos años de su carrera.
Es por eso que para Cristiano, a sus 37 años, jugar con el Manchester United —uno de los clubes más famosos del mundo a pesar de la escasez reciente de títulos— no es suficiente. Quiere competir en el máximo escenario y alzar la mayor cantidad de trofeos posible.
Esto lleva al actual estancamiento con el United, que continúa siendo disruptivo y perjudicial mientras avanzan los días.
Públicamente Cristiano no ha regresado a los entrenamientos de pretemporada del club inglés por “razones personales”. La expectativa, y que el nuevo técnico del United Erik ten Hag repite constantemente, es que el astro portugués regresará antes que inicie la Liga Premier y será un elemento clave de su ofensiva.
Pero la realidad es distinta. Al parecer Cristiano desea salir luego de tan solo una temporada de vuelta a Old Trafford, esto debido a que el club no disputará la Liga de Campeones y no está en forma para pelear con los mejores equipos de la Premier, como el Manchester City y Liverpool. El United terminó sexto la campaña anterior, a 35 unidades del City.
Entonces, mientras el resto del equipo se alista y conoce los métodos de ten Hag en una gira por Tailandia y Australia, Cristiano está en su casa en Portugal con su familia mientras que su agente Jorge Mendes le busca un nuevo club a su cliente más famoso.
De momento no hay comprador. Y la temporada de la Liga Premier inicia en alrededor de dos semanas.
“No sé que le dijo Cristiano al club y al técnico”, comentó el mediocampista del United Bruno Fernandes, quien también juega con Cristiano en la selección. “No sé que está pensando, si quiere irse. No le pregunté”.
En la superficie, el United quiere mantener a Cristiano —el líder anotador del equipo inglés la temporada pasada con 24 goles y que es el símbolo para el departamento de mercadotecnia— y ten Hag consideró al delantero “increíblemente importante”, así como decir que “no está en venta”.
Pero, ¿por qué otros equipos de elite no quieren a un jugador que aún garantiza goles y ganancias?
Anotar es aparentemente la meta del fútbol, pero no es necesariamente lo único importante para un técnico en la actualidad. Un cierto nivel de movilidad y habilidad para ser parte de un grupo que presiona es importante y Cristiano no lo ofrece, incluso si sigue siendo un jugador sumamente atlético con la extraña habilidad de cobrar vida en el área penal y anotar desde cualquier lugar. La estructura de un equipo debe cambiar para acomodar a un elemento como Cristiano, cubriendo sus deficiencias y la necesidad de convertirlo en el punto focal.
En pocas palabras, su presencia requiere un compromiso. El portugués es un problema y una solución.
¿Entonces qué sigue? ¿Una incómoda tregua con el United y un vergonzoso regreso a un equipo que disputará la Liga Europa y con pocas probabilidades de dar pelea por el título de la Premier? ¿O podrá Mendes negociar un canje espectacular como lo hizo el año pasado cuando Cristiano selló su retorno sensacional a Inglaterra?