BERLÍN (AP) — Funcionarios locales del partido del canciller alemán Olaf Scholz se reunieron el jueves para debatir la posibilidad de expulsar al excanciller Gerhard Schroeder por sus lazos con Vladimir Putin.
Los vínculos entre Schroeder con el presidente ruso y con el sector energético alemán, además de su negativa a condenar enérgicamente la invasión rusa de Ucrania, han causado un pronunciado deterioro en su imagen pública.
Una comisión de arbitraje del Partido Socialdemócrata en Hannover, donde vive Schroeder, está considerando 17 solicitudes de militantes del partido para expulsarlo.
No se espera una decisión inmediata.
En Alemania, expulsar a un militante de un partido es un proceso complicado que no siempre prospera.
Schroeder no asistió a la reunión ni envió a un abogado para representarlo, informó la agencia de noticias alemana dpa.
Schroeder, de 78 años, no ha mostrado indicio de atender a llamados de dirigentes partidistas de renunciar voluntariamente a la organización política. Fue canciller entre 1998 y 2005 y fue dirigente de los socialdemócratas entre 1999 y 2004.
En mayo, la empresa gasífera rusa Rosneft anunció que Schroeder renunciará a su junta directiva, de la que era presidente desde el 2017. Tampoco seguirá con su nominación a ser parte de la junta directiva de Gazprom, formulada antes de que Rusia lanzó su invasión el 24 de febrero.