SAN FRANCISCO (AP) — Brittney Griner no ha sido olvidada en las Finales de la NBA.
La estrella de la WNBA permanece detenida en Rusia desde hace más de 100 días. Estados Unidos insiste en que el procedimiento de arresto fue indebido.
Y algunos miembros de los Celtics de Boston están usando su plataforma durante la serie por el título de la NBA para sumar sus voces a las que exigen que se permita a Griner volver a su nación.
Varios jugadores vistieron camisetas negras con la leyenda: “Somos BG”, las iniciales de Griner, durante la sesión de práctica del sábado. Este domingo, se realizará el segundo encuentro de las Finales entre Boston y los Warriors de Golden State.
“Es extremadamente difícil ver por lo que ella está pasando”, dijo el astro de los Celtics, Jayson Tatum. “Sé que todos sienten y ven esto, y evidentemente todos estamos juntos para apoyarla y tratar de que vuelva con su familia... Sí, usamos hoy esas camisetas para manifestarle nuestro apoyo”.
Las prendas tenían también impreso en los dorsales un código QR que lleva a una petición en línea que busca reunir 300.000 firmas en apoyo de que se permita a Griner el regreso a Estados Unidos.
“Sentimos que era una buena idea usar nuestra disponibilidad y nuestras plataformas para llamar la atención sobre ciertos asuntos”, dijo el base de los Celtics, Jaylen Brown, quien tiene un puesto dentro del sindicato de jugadores. “Siempre he defendido eso. Si eres un deportista, no sólo estás aquí para divertir a la gente. Tenemos voz”.
Griner, quien juega para el Mercury de Phoenix, está detenida desde febrero. Supuestamente, las autoridades encontraron en su equipaje algunos cartuchos de cigarrillo electrónico que contenían un derivado del cannabis, en el aeropuerto de Moscú.
La jugadora, dos veces campeona olímpica con Estados Unidos, enfrenta cargos de narcotráfico que podrían llevarla a prisión incluso por 10 años.
Las autoridades rusas insisten en que el caso de Griner es meramente de índole penal, sin connotaciones políticas.
Pero la guerra lanzada por Rusia contra Ucrania ha hecho que las relaciones entre Moscú y Washington se deterioren a su peor situación desde la Guerra Fría.