El número de muertos civiles y de violaciones de los derechos imputables al ejército maliense apoyado por militares extranjeros experimentó un "alza exponencial" en el primer trimestre de 2022, indicó el lunes la misión de la ONU (Minusma) en el país.
El número de personas muertas en este periodo imputadas a todas las partes en conflicto (grupos armados islamistas y otros, milicias y grupos de autodefensa, fuerzas de defensa) se multiplicó por cuatro de un trimestre a otro, pasando de 128 a 543, dijo la Minusma.
Aunque los grupos armados afiliados a Al-Qaida o a la organización Estado islámico (EI) siguen siendo los principales autores de la violencia contra los civiles, la Minusma registró 320 violaciones de los derechos humanos, entre ellos la muerte de 248 civiles, imputables a las Fuerzas de defensa y de seguridad (FDSM) en los tres primeros meses de 2022.
Estas fuerzas son "apoyadas por elementos militares extranjeros", añadió. La Minusma en su nota trimestral no precisó el origen de esos elementos extranjeros.
La junta en el poder en Mali desde agosto de Bamako 2020 se apartó en los últimos meses de Francia y de sus socios europeos, y se acercó a Rusia.
Los europeos denuncian el uso que los militares hacen de los servicios de la empresa de seguridad privada rusa Wagner, cuyas actuaciones son controvertidas.
La junta desmiente y habla de cooperación reforzada de Estado a Estado con Rusia.
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