La representante estadounidense del Comercio, Katherine Tai, anunció el miércoles el inicio de un procedimiento contra Canadá por el persistente diferendo comercial sobre los lácteos.
Estados Unidos exigió de forma oficial "consultas" para resolver las diferencias en el marco del acuerdo comercial con México y Canadá AEUMC por su sigla en inglés), considerando que "las restricciones impuestas por Canadá" sobre los productos estadounidenses son "contrarias" a su compromiso en dicho tratado que sustituyó al ALCA.
"Indicamos claramente a Canadá que sus nuevas políticas no son conformes a las disposiciones del AEUMC e impiden a los trabajadores, productores, agricultores y exportadores estadounidenses extraer total beneficio del acceso al mercado al cual Canadá se comprometió en virtud" de este tratado, aseguró Tai, en un comunicado.
Las medidas impuestas por Canadá limitan una gran parte de las exportaciones estadounidenses de leche, mantequilla, helado, entre otros lácteos, y da preferencia a productores canadienses que según los funcionarios estadounidenses restringe el acceso al mercado.
La administración del presidente Joe Biden ya hizo un llamado al grupo especial de resolución del AEUMC, que el 1 de julio de 2020 reemplazó el acuerdo de libre comercio norteamericano (ALCA) de 1994.
Dicho grupo ya había concluido a inicios de enero que la practica de Canadá de reservar contingentes arancelarios para uso exclusivo de sus procesadores lácteos era incompatible con el nuevo tratado.
La semana pasada Canadá había anunciado su nueva política estimando que se ajustaba al acuerdo, algo que Washington no comparte.
En principio, en caso de no haber un consenso, Washington podría imponer derechos de aduana.
Hasta ahora la administración Biden y el gobierno canadiense habían manifestado su voluntad de arreglar el litigio por la vía de las consultas.
"Las políticas proteccionistas de los lácteos de Canadá son una preocupación mayor", dijo el secretario del Departamento de Agricultura, Tom Vilsack, citado en el comunicado.
Vilsack destacó como "absoluta prioridad" el acceso real al mercado canadiense y que el gobierno consideraba "todas las opciones disponibles para avanzar en este objetivo".
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