SALEM, Oregon, EE.UU. (AP) — Los cárteles extranjeros de la droga, que el año pasado crearon plantaciones ilegales de marihuana al aire libre en el estado de Oregon, se están adaptando a la presión que empieza a ejercerse sobre ellos, según dijeron el jueves las autoridades policiales.
Los nuevos desafíos están surgiendo mientras un grupo de trabajo creado por la legislatura se reunió por primera vez para averiguar cómo combatir los problemas relacionados con el cannabis, algunos de los cuales amenazan a la industria de la marihuana recreativa legal y regulada de Oregon.
El Grupo de Trabajo sobre Intoxicantes Derivados del Cannabis y Producción Ilegal de Cannabis tiene la responsabilidad de recomendar la financiación y la estructura de mando para que los cuerpos de seguridad puedan combatir la producción ilegal de cannabis; los cambios en las leyes estatales para hacer frente al tráfico de mano de obra y al robo de agua por parte de las plantaciones de marihuana financiadas por los cárteles; y la regulación de la ingeniería genética del cannabis, entre otras tareas.
Uno de los mayores problemas es la reciente proliferación de cultivos ilegales de marihuana de dimensiones industriales.
A principios de 2021, cientos de invernaderos empezaron a aparecer en los condados de Josephine y Jackson, en el sur de Oregon, algunos dentro de los límites de la ciudad, otros establecidos abiertamente a lo largo de las carreteras o escondidos en valles remotos.
No contaban con la licencia de la Comisión de Licores y Cannabis de Oregon (OLCC, por sus siglas en inglés) y están financiados por cárteles criminales extranjeros, procedentes de América Latina, Europa y Asia, según las autoridades.
Había más campos de cultivo de cannabis de los que las autoridades podían desmantelar. Las operaciones de producción ilegal en espacios cerrados han existido durante mucho tiempo, pero ahora las bandas criminales están empujando cada vez más en esa dirección, una estrategia que les permite cultivar durante todo el año, dijo un miembro del grupo de trabajo.
“Empezamos a escuchar sobre el condado de Josephine, numerosas operaciones que se trasladan a interiores”, dijo el sargento de la Policía Estatal de Oregon, Tyler Bechtel.
Sin embargo, el comisario del condado de Josephine, Dave Daniel, afirmó que no ha oído hablar de que los cárteles que operan en su condado se hayan pasado a los cultivos de interior y que, en su lugar, están estableciendo operaciones de cultivo más numerosas pero de menor tamaño para pasar desapercibidos.
“Parece que se están diversificando y extendiendo operaciones a muchos cultivos pequeños para evitar llamar la atención”, dijo Daniel en un correo electrónico a The Associated Press. “Era previsible este cambio, ya que nos hemos centrado principalmente en los grandes cultivos y ahora en los más pequeños. Es un buen movimiento comercial para ellos y nos retrasará”.
La policía estatal ha identificado docenas de organizaciones de narcotraficantes de base étnica, cada una de las cuales opera entre cinco y 30 cultivos de marihuana, dijo Bechtel.
Para dar una idea del alcance del problema, la Comisión de Justicia Penal de Oregon dice que se incautaron 551.000 plantas de marihuana en el condado de Jackson, el condado de Josephine y el condado central de Deschutes de Oregon desde el 1 de julio de 2020 hasta el 30 de junio de 2021. Y eso fue una pequeña fracción del cultivo ilegal. Las autoridades también incautaron casi 3,4 millones de dólares en efectivo en las redadas.
“A pesar de las vías legales para la compra y venta de marihuana dentro de Oregon, un mercado ilegal de marihuana sigue causando problemas de seguridad pública, incluyendo el desvío de marihuana a otros estados, la venta de marihuana a compradores menores de edad, el cultivo ilegal de marihuana en propiedades privadas, estatales y federales, y el enriquecimiento de las operaciones criminales organizadas”, dijo la comisión en un informe.