BOSTON (AP) — Mario Batali fue declarado inocente de abuso indecente y agresión el martes, tras un juicio rápido en el que el famoso chef renunció a su derecho a que un jurado decidiera su destino.
Batali, quien se declaró inocente en 2019, pudo haber pasado hasta dos años y medio en la cárcel y tenido que registrarse como agresor sexual de haber sido hallado culpable.
Su acusadora contó en la corte que quedó “conmocionada, sorprendida y alarmada” cuando el otrora astro de Food Network, de 61 años, la besó y manoseó agresivamente mientras se tomaban una selfie en un restaurante de Boston en 2017.
La mujer de 32 años, que trabaja en una compañía de software en el área, dijo que se sintió confundida e incapaz de hacer algo para detener a Batali mientras éste la tocaba sin su consentimiento. También presentó una demanda pendiente en el Tribunal Superior del condado de Suffolk en Boston, que según el abogado de Batali le daba un incentivo financiero para mentir.
Batali se encuentra entre una serie de hombres de alto perfil que han enfrentado un juicio público durante el movimiento #MeToo contra el abuso y el acoso sexual en los últimos años.
Luego que cuatro mujeres lo acusaron de manoseo inapropiado en 2017, renunció a las operaciones diarias en su imperio de restaurantes y dejó el programa de cocina de ABC “The Chew”, que ya no se transmite.
También se disculpó y reconoció que las acusaciones “coinciden” con la forma en que ha actuado.
“He cometido muchos errores”, dijo Batali entonces en un boletín distribuido por correo electrónico. “Mi comportamiento estuvo mal y no hay excusas. Asumo toda la responsabilidad”.
El juicio comenzó el lunes con Batali, en una decisión sorpresiva, renunciando a su derecho a un juicio con jurado y optando en vez por que el juez decida su destino.
Su abogado argumentó que el asalto de Boston nunca ocurrió y que la acusadora no era una testigo fiable, y se centró en la reciente admisión de la mujer de que intentó evitar servir en un jurado afirmando que era clarividente. También fue acusada, en ese caso, de violar las órdenes del juez de mantener la mente abierta y no discutir el caso con otros.
Al emitir su veredicto, el juez de la Corte Municipal de Boston, James Stanton, estuvo de acuerdo con la afirmación de que la acusadora tenía problemas de credibilidad. Tanto la acusadora como Batali abandonaron la sala sin hablar con la prensa.
Batali era conocido por programas de TV como “Molto Mario” y “Iron Chef America”, pero su vertiginosa carrera se derrumbó en medio de acusaciones de conducta sexual inapropiada.
El año pasado, Batali, su socio comercial y su compañía de restaurantes en Nueva York acordaron pagar 600.000 dólares para resolver una investigación de cuatro años realizada por la oficina del fiscal general de Nueva York sobre acusaciones de que Batali y otros miembros de su personal acosaron sexualmente a empleados.
En Boston, Batali abrió una sucursal del popular mercado de comida italiana Eataly y un restaurante Babbo Pizzeria e Enoteca en el Seaport District. Pero desde entonces vendió su participación en Eataly y cerró el restaurante.