WASHINGTON (AP) — El presidente Joe Biden destacó el miércoles que el déficit del gobierno crecerá menos de lo esperado este año y que la deuda nacional se reducirá este trimestre. El mandatario estadounidense busca contrarrestar las críticas a su liderazgo económico en medio de la creciente consternación por la inflación de cara a las elecciones intermedias donde se decidirá el control del Congreso.
Adoptando la reducción del déficit como una forma de combatir la inflación, Biden enfatizó que la caída de la deuda nacional sería la primera en seis años, un logro que no alcanzó el expresidente Donald Trump a pesar de sus promesas.
“La conclusión es que el déficit aumentó todos los años con mi predecesor antes de la pandemia y durante la pandemia. Ha bajado los dos años desde que llegué aquí”, dijo Biden. ”¿Por qué es importante? Porque reducir el déficit es una forma de aliviar las presiones inflacionarias”.
El presidente demócrata ha puesto el acento en la reducción del déficit —la diferencia entre lo que un país gasta y lo que produce— para responder a las críticas de los republicanos de que el paquete de 1,9 billones de dólares promovido por el gobierno de Biden para enfrentar las consecuencias económicas del coronavirus empeoró las finanzas del país. Es un intento de pulir sus credenciales como responsable de la economía mientras trata de evitar las críticas porque la inflación está en su nivel más alto en 40 años. Con la reapertura de la economía tras la pandemia y la escasez de materias primas resultante de la guerra entre Rusia y Ucrania, los altos precios constituyen un peligro político crucial para los demócratas.
Pero no está claro si la mayor responsabilidad fiscal beneficiará políticamente a Biden mientras los demócratas intentan mantener su mayoría en el Congreso. Sus dos predecesores demócratas, Bill Clinton y Barack Obama, también redujeron el déficit, hecho que sus sucesores republicanos aprovecharon para rebajar los impuestos.
Según los cálculos, el déficit presupuestario de este año fiscal disminuirá 1,5 billones de dólares, comparado con 1,3 billones pronosticados inicialmente. Con un menor endeudamiento del gobierno se limitan las fuentes financieras de la inflación.