El premio Nobel de la Paz José Ramos-Horta ganó las elecciones presidenciales en Timor Oriental, según los resultados oficiales parciales anunciados el miércoles por las autoridades.
Ramos-Horta, que ya dirigió el país entre 2007 y 2012, obtuvo un 62,09% de los votos en la segunda vuelta, frente al 37,91% logrado por su rival, el presidente saliente Francisco "Lu Olo" Guterres, según indicó el secretariado electoral en su página web.
Estos resultados todavía deben ser validados por la comisión electoral del país.
El político de 72 años ya fue el más votado en la primera vuelta celebrada el 19 de marzo, con 46% de los sufragios frente al 22% de Guterres.
Está previsto que comience su mandato de cinco años el 20 de mayo, fecha en que se conmemora el 20º aniversario de la independencia de Timor Oriental tras 24 años de ocupación indonesia.
En este país de 1,3 millones de habitantes, situado en la mitad este de la isla de Timor, en el archipiélago indonesio, la función presidencial es sobre todo honorífica.
Pero esta vez, Ramos-Horta prometió que si ganaba los comicios "abriría un diálogo" entre los dos principales partidos --el Congreso Nacional para la Reconstrucción de Timor Oriental (CNRT) y el Frente Revolucionario por un Timor Oriental Independiente (Fretilin)-- para acabar con la parálisis política en la que está sumido el país.
- Crisis política -
Guterres, de 67 años, un exguerrillero y líder del partido Fretilin, fue electo presidente en 2017 con el apoyo del antiguo rebelde Xanana Gusmao, primer presidente del país y actual dirigente del CNRT. Pero luego rechazó nombrar ministros del CNRT, desatando una crisis política.
Pero este año, Gusmao y su partido decidieron impulsar a Ramos-Horta, reconocido en 1996 con el premio Nobel de la Paz por su búsqueda de una solución pacífica para el conflicto de Timor Oriental, entonces bajo ocupación indonesia.
Ramos-Horta, que fue primer ministro antes de presidir el país entre 2007 y 2012, volvió a la política activa para oponerse a Guterres, al que acusa de haber violado la Constitución.
La vida política de Timor Oriental se ha visto a menudo salpicada de violencia.
En 2018, una serie de enfrentamientos durante las elecciones legislativas causaron decenas de heridos, y en 2006, rivalidades políticas degeneraron en un conflicto abierto en la capital, Dili, en el que murieron decenas de personas.
Esta vez, la misión de observación de la Unión Europea (UE) consideró que los comicios presidenciales se habían llevado a cabo de forma satisfactoria. "Las elecciones fueron competitivas y la campaña fue ampliamente pacífica", concluyó.
Ambos candidatos se comprometieron a respetar el resultado de la elección.
Timor Oriental fue una colonia portuguesa hasta 1975. Después, estuvo ocupado sangrientamente por Indonesia hasta su independencia, en 2002.
La economía del país sigue sufriendo las consecuencias de la pandemia de covid-19.
Según el Banco Mundial, el 42% de su población vive en la pobreza.
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