TOKIO (AP) — El ministro de Relaciones Exteriores de Japón Yoshimasa Hayashi regresó de Polonia el martes con 20 ucranianos desplazados por la guerra, parte de esfuerzos japoneses para desempeñar un papel mayor en la ayuda internacional a Ucrania.
Durante sus tres días en Polonia, Hayashi visitó instalaciones para refugiados ucranianos en Varsovia y conversó con funcionarios polacos, organizaciones humanitarias internacionales y grupos cívicos para evaluar cómo puede Japón proveer ayuda.
“Al observar la grave situación enfrentada por los ucranianos que se fueron forzados a huir de su país debido a la invasión rusa, he renovado mi determinación de que Japón debe cooperar con la sociedad internacional y proveer la asistencia máxima para que ellos puedan regresar a sus vidas ordinarias lo más pronto posible”, dijo a los reporteros.
Japón tiene una política de refugiados extremamente estricta y se ha mostrado renuente a aceptar plenamente a trabajadores migrantes, lo que hace su oferta de aceptar ucranianos algo inusual. Sin embargo, el gobierno los llama evacuados y no está claro aún si la situación en Ucrania cambiará la política migratoria japonesa.
Tokio espera que los 20 evacuados se queden en Japón al menos seis meses y proveerá más respaldo si es necesario, dijo el viceministro de Justicia Jun Tsushima, que viajaba con Hayashi.
Japón ya había aceptado otros 30 ucranianos, todos familiares de algunos de los casi 2.000 ucranianos residentes en el país que arribaron por su cuenta desde el comienzo de la invasión rusa.
Funcionarios de la cancillería dijeron que la mayoría de los desplazados ucranianos de guerra tienen lazos en Europa y esperan regresar una vez la situación lo permita, lo que indica que Japón no los está tratando como refugiados que buscan residencia permanente y protección.
Hayashi dijo que estaba impresionado por el alto nivel de cuidados y respaldo que se les está dando a los refugiados ucranianos en Polonia, incluyendo comida, atención médica y respaldo a los niños. “Lo que observamos aquí ciertamente nos ayudará a planean nuestro respaldo a ellos en Japón”, agregó.
Las 20 personas previamente habían contactado a las embajadas japonesas en Ucrania y Polonia, pero habían pasado trabajo para organizar su propia trasportación a Japón, informó Hayashi, que no dio más detalles por razones de privacidad.