FORT MYERS, Florida (AP) — Carlos Correa declaró que octubre “es su momento”. Ciertamente no lo ha sido para Minnesota.
Los Mellizos esperan que el puertorriqueño cambie la dinámica, incluso si su estadía en Minneapolis es corta.
“Quiero construir una cultura ganadora en la organización”, dijo Correa.
La exestrella de los Astros de Houston se puso la camiseta con el número 4 de los Mellizos durante su presentación formal el miércoles, cinco días después de que llegó a un acuerdo de 3 años y 105,3 millones de dólares. El jugador cuenta con opciones para salirse del contrato tras la primera y segunda campaña.
Los Mellizos suman 18 juegos de postemporada consecutivos sin ganar. Su último triunfo fue en octubre de 2004 y la derrota más reciente fue en la ronda de comodines en 2020, cuando Correa conectó el jonrón de la ventaja en el Target Field para completar la barrida de Houston.
Correa ha sido campeón de la Serie Mundial y consolidó su casta en los playoffs en el otoño pasado al celebrar el cuadrangular de la ventaja ante Boston apuntando a su muñeca, volteando al dugout y diciendo “es mi momento”.
“Eleva la confianza porque simplemente es una persona que lo ha logrado antes”, dijo el mánager de los Mellizos Rocco Baldelli.
Es parte del motivo por el que un equipo de un mercado modesto como Minnesota, optó por un inusual acuerdo. El salario promedio de Correa será de 35,1 millones de dólares. Quedó apenas por detrás del pacto de Mike Trout, de 36 millones con los Angelinos. Se trata de un monto que, al inicio de la campaña, excederá lo previsto en las nóminas enteras de Baltimore, Pittsburgh y Cleveland.
El compromiso que hicieron los dueños de los Mellizos, un año después de que terminaron últimos de la División Central de la Liga Americana, rompe un patrón en un deporte en el que la estrategia de perder a propósito exacerbó los ánimos de los peloteros y desembocó en un paro patronal de 99 días.
“Cuando le hable al (presidente) Jim Pohlad, cuando nos acercábamos a un acuerdo el viernes, hubo apoyo inmediato”, dijo el presidente de operaciones Derek Falvey. “No hay otra forma de describirlo”.
Correa será el infielder mejor pagado de las Grandes Ligas — y tendrá oportunidad de pedir más muy pronto.
El pelotero de 27 años cambió de agente durante el paro patronal, de William Morris Endeavor a Scott Boras. El miércoles, Correa dijo que Boras le habló de un acuerdo más corto que podría darle oportunidad de regresar al mercado rápido. Juntos pusieron en la mira un estadio en el que Correa pudiera destacar.
Se fijaron en el Target Field. Correa tiene un promedio de .413, con un OPS de 1.205, en 15 juegos en Minnesota.
“Cuando un jugador está tan cómodo en un estadio, sabíamos que encajaría”, dijo Boras.
Si decide irse después de 2022, Correa se uniría a un mercado de la agencia libre que podría incluir igualmente a campocortos de la talla de Trea Turner de los Dodgers, Xander Bogaerts de Boston y Tim Anderson de los Medias Blancas. Correa es más joven que todos ellos.
Primero quiero tener un impacto en Minnesota. Bateó para .279, con 26 cuadrangulares, 92 remolcadas y .851 de OPS la temporada pasada. Ha sido elegido dos veces al Juego de Estrellas, fue el Novato del Año en 2015 y tiene un OPS de .849 en 79 encuentros de postemporada.