La gloria del jubilado: el VW Iltis en el rally de invierno Le Jog

Mercedes SL, BMW 328 y, por qué no, también un Mini o el Escarabajo de Volkswagen: para un rally de coches clásicos hay mejores candidatos que el VW Iltis. Al fin y al cabo, con su motor de 1,7 litros y 55 kW/75 CV, el todoterreno de 1978 es extremadamente poco potente, e, incluso con el acelerador a fondo, apenas supera los 120 km/h.

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HANDOUT - Aun con su escasa potencia, el Iltis resulta competitivo en un rally por tierras irregulares gracias a su resistencia y a la tracción total conectada. Foto: Craig Pusey Photography/dpa - ATENCIÓN: Sólo para uso editorial con el texto adjunto y mencionando el crédito completo

Mercedes SL, BMW 328 y, por qué no, también un Mini o el Escarabajo de Volkswagen: para un rally de coches clásicos hay mejores candidatos que el VW Iltis. Al fin y al cabo, con su motor de 1,7 litros y 55 kW/75 CV, el todoterreno de 1978 es extremadamente poco potente, e, incluso con el acelerador a fondo, apenas supera los 120 km/h.

Bajo su techo ondulante, que hace que cualquier tienda de campaña parezca sólida, hay tal corriente de aire que nadie se atrevería a sacarlo del garaje una vez comenzado el otoño, y mucho menos en invierno. Por este motivo, parece un milagro que el Iltis haya sido uno de los protagonistas de la última edición del rally británico Le Jog, que tuvo lugar en diciembre de 2021. 

En este rally de invierno, un convoy de casi 100 equipos de coches clásicos recorre una distancia de 2.400 kilómetros desde Land’s End, en el extremo sudoeste de Inglaterra, hasta John o’Groats, el punto más septentrional de Escocia. 

El rústico jubilado de la colección Volkswagen no solo logró ganarse el respeto y reconocimiento de los demás participantes, sino también incluso un poco de envidia. Quien haya atravesado en el más crudo invierno las irregulares y accidentadas pistas de las Tierras Bajas, Medias y Altas de la isla sabe muy bien por qué.

Fabricado por Volkswagen para uso del Ejército alemán, el Iltis no solo ha hecho carrera como vehículo militar. También es, en cierta medida, un coche deportivo.

Sascha Neumann, portavoz de la división Classic Collection de Volkswagen, informa que, con un sutil aumento de potencia hasta unos buenos 74 kW/100 CV, el Iltis ganó el Rally París-Dakar de 1980 con el número de salida 137.

Y en segundo, cuarto y noveno lugar había otros tres Iltis, lo que Neumann ve como una prueba de la calidad del coche: "Cuatro Iltis en la salida y todos entre los diez primeros en llegar a la meta", precisa el experto.

Lo que le falta al Iltis en velocidad, lo compensa en resistencia. Y con la tracción total conectada, no hay quien lo pare. Es esta característica la que contribuye a su buen desempeño en los caminos forestales, pantanos, montañas y playas del rally Le Jog. 

Al igual que hace más de 40 años en el Rally Dakar, el Iltis volvió a ocupar el podio, logrando para el equipo un tercer puesto dentro de su categoría. 

El Iltis merece un lugar de honor en la historia del fabricante alemán, y no solo por su sorprendente éxito en el desierto, sino también por una característica técnica que lo convierte en el coche soñado para el aventurero viaje al fin del mundo inglés: su tracción total seleccionable.

Al fin y al cabo, fue la insuperable maniobrabilidad de un prototipo de Iltis durante pruebas de conducción realizadas en invierno lo que llevó a Audi a la idea de incorporar la tracción total también a los coches deportivos de carretera, decisión que dio lugar al desarrollo del primer Audi Quattro en 1980.

Sin embargo, los militares fueron la fuerza motriz del desarrollo del Iltis. En los años 70 estaba a punto de finalizar la producción del todoterreno Munga, desarrollado por la marca DKW, precursora de Audi, y el Ejército alemán estaba desesperado por un nuevo vehículo todoterreno. 

Como el Volkwagen Tipo 82, hasta entonces utilizado como vehículo militar, era demasiado refinado para terrenos accidentados debido a su pura tracción trasera, y el proyectado Euro-Jeep se había atascado en las negociaciones de contratos multinacionales, Volkswagen aprovechó la ocasión y sometió una oferta.

Aunque el fabricante con sede en el estado federado de Baja Sajonia no había construido hasta entonces ningún todoterreno propiamente dicho, se comprometió a desarrollar, hasta 1977, diez prototipos de un nuevo modelo bajo el código EA 110. El vehículo comenzó a fabricarse en serie en noviembre de 1978 con el nombre de Iltis, informa Neumann. La Bundeswehr se mostró satisfecha y adquirió las unidades acordadas de acuerdo con el contrato.

Ya a principios de 1979, eran 2.000 los Iltis que llevaban uniforme, y a finales de 1981 las Fuerzas Armadas de Alemania se habían hecho con un total de 8.800 vehículos para el servicio médico y de inteligencia. Sin embargo, en 1982, tras solo cinco años y 10.801 unidades fabricadas, la producción cesó. La empresa canadiense Bombardier fabricó en su sede 4.500 unidades más casi sin cambios, hasta que el modelo desapareció del mercado en 1988.

En el mundo de los coches clásicos, el Iltis nunca llegó a ser famoso. "El vehículo fracasó rotundamente con los clientes privados porque era simplemente demasiado caro", afirma Frank Wilke, experto de la empresa alemana de análisis del mercado Classic Analytics. 

"Con poco menos de 40.000 marcos alemanes (aproximadamente 22.000 dólares estadounidenses al cambio actual), el cuatro plazas costaba casi tres veces más que un Golf de la época", puntualiza. No es de extrañar, por lo tanto, que ni siquiera el diez por ciento de los vehículos se ofreciera en versión turismo.

Mientras que otros coches clásicos todoterreno alcanzan actualmente precios elevados, añade Wilke, el Iltis es más probable que se venda como un coche usado que como un clásico. Según los datos de Classic Analytics, el antiguo coche de rally se cotiza actualmente en unos 12.000 euros (aproximadamente 13.000 dólares estadounidenses).

dpa

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