Muere "Cabo Anselmo", un agente infiltrado de la dictadura militar brasileña

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Sao Paulo, 16 mar José Anselmo dos Santos, más conocido como Cabo Anselmo y quien fue un conocido agente infiltrado al servicio de la dictadura militar brasileña (1964-1985), murió a los 80 años en Sao Paulo, informaron este miércoles medios locales. El antiguo militar, que delató, entre otros, a la militante comunista paraguaya Soledad Barrett, con quien mantenía una relación sentimental, falleció por un "mal súbito", según señaló a la prensa un abogado con el que trabajó y cuyo nombre no fue divulgado. Durante la dictadura, Cabo Anselmo, nacido el 13 de febrero de 1941 en el estado brasileño de Sergipe (noreste), se infiltró en grupos guerrilleros y delató a sus integrantes a los órganos de represión del régimen brasileño. Antes, se alistó en la Marina y lideró unas protestas para exigir mejores condiciones laborales, en uno de los actos de insubordinación militar que precedió el golpe de Estado de 1964. Expulsado de la Marina, viajó a Cuba para "participar de la formación del primer núcleo de entrenamiento de la guerrilla de la Vanguardia Popular Revolucionaria (VPR)", que luchó contra la dictadura, según el centro de estudios Fundación Getulio Vargas. Poco después de volver a Brasil fue detenido por agentes del régimen y, a cambio de su libertad y después de haber sido torturado, según dijo en entrevistas posteriores, empezó a trabajar para ellos como informante. Anselmo delató a compañeros de esos grupos armados, incluida a su entonces pareja, Soledad Barrett Viedma, una guerrillera paraguaya que luchó contra las dictaduras suramericanas en los años 70 y 80 y fue asesinada junto con otros colegas en 1973, en la conocida como "Masacre de Chácara Sao Bento", en el estado de Pernambuco (noreste). "Me arrepiento (apenas) de haber traicionado mi compromiso con la patria cuando dejé la Marina y pasé al lado de la insubordinación", afirmó el exmilitar durante una entrevista a TV Cultura de Sao Paulo en 2011, recogida hoy por el diario 'O Globo'. EFE cms/cpy

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