Puerto Príncipe, 13 mar Varios jefes de Estado y de Gobierno se comprometieron a brindar ayuda a Haití para luchar contra la inseguridad que azota al país, anunció este domingo el primer ministro haitiano, Ariel Henry, a su regreso de Chile, donde participó en la toma de posesión del presidente Gabriel Boric. En rueda de prensa, Henry informó que, en el contexto de la toma de posesión, mantuvo reuniones bilaterales con diversos jefes de Estado y de Gobierno en las que abordó el problema de inseguridad que sufre la nación caribeña. Este viaje "nos ha permitido reunirnos con una serie de líderes, no solo de este hemisferio sino de otros hemisferios, que prometen prestarnos ayuda para combatir uno de los flagelos que nos preocupan, que es el de la inseguridad", aunque no concretó de qué forma facilitarán la ayuda ni qué naciones la aportarían. En ese sentido, únicamente indicó que "se están organizando cosas" para proporcionar asistencia al país "en los próximos días", según le expresaron diversos jefes de Estado y de Gobierno. "Como saben, uno de los problemas específicos que tenemos es la inseguridad. Y esto es preocupante. Lo habíamos discutido. Lo hablé con varias personalidades", entre las que citó al rey de España. Para el primer ministro, este viaje era "importante" para mostrar la presencia de su país en la región, pero también para expresar su solidaridad con la democracia, dijo. Asimismo, indicó que durante su viaje a Chile también mantuvo conversaciones con la comunidad haitiana, compuesta por unos 170.000 residentes, a la que calificó como "muy dinámica". "Hay cosas que exigen al Estado. Y el Estado haitiano asume una serie de compromisos en torno a los documentos legales" necesarios "para poder vivir en Chile", indicó. "Durante nuestras conversaciones, además de lo que el Estado promete hacer a nivel de la administración pública (para que tengan un mejor servicio), también nos comprometimos a tener una mejor interacción. Eso significa intercambiar con ellos, sobre todo a nivel cultural", añadió. En los últimos veinte años, miles de haitianos han huido de su país en busca de una vida mejor en varios países de América, como Brasil, Chile y Ecuador, aunque, en los últimos años, muchos cientos de ellos han cruzado más de una docena de países de la región para entrar a Estados Unidos o México. El agravamiento de la crisis en Haití desde 2019 ha hecho que muchos más haitianos abandonen su país para escapar de la creciente inseguridad que sigue debilitando la economía. Desde el asesinato de su presidente Jovenel Moise, en julio de 2021, Haití vive una de las peores crisis sociopolíticas y económicas de su historia, marcada por la creciente inseguridad, los asesinatos, las violaciones de cientos de mujeres, miles de secuestros, la grave crisis alimentaria y el empobrecimiento de las clases más vulnerables.