El Gobierno de Boric promete subir el sueldo mínimo en 2022 tras el cambio de mando

Guardar

Santiago de Chile, 11 mar El ministro de Hacienda de Chile, Mario Marcel, anunció su intención de hacer una primera subida del salario mínimo en 2022, minutos después de asumir la cartera y de que jurara como presidente el progresista Gabriel Boric. A la salida del Senado, donde tuvo lugar la ceremonia del traspaso de poder, Marcel explicó que buscará aumentar el salario mínimo de 350.000 (sobre 430 dólares) a 500.000 pesos (sobre 620 dólares) como "un compromiso para el horizonte de los cuatro años de Gobierno". Pero al mismo tiempo, señaló, "habrá un primer paso, que será muy importante, y tendrá lugar durante este año", aunque no especificó de cuánto será la subida más inmediata. "No es el momento para entrar en los detalles, pero lo que sí está claro es que se quiere dar y avanzar de manera significativa a esa meta", aclaró. La elección de Marcel, expresidente del Banco Central y adalid de la consolidación fiscal, fue un claro guiño al centro por parte de Boric, un antiguo líder estudiantil y exdiputado que lidera una coalición entre el Frente Amplio y el Partido Comunista. En la línea con sus anteriores intervenciones, el titular de cartera enfatizó que se encuentran trabajando "una agenda en materia económica" para combatir el escenario de inflación que deja la pandemia de la covid-19. También recalcó la relevancia de realizar una reforma tributaria, una de las granes promesas del programa de Boric, que ha defendido fortalecer los servicios públicos incrementando la recaudación fiscal en 8 puntos porcentuales del PIB. "Vamos a adelantar algunas definiciones fiscales respecto de lo que exige la ley, como el plazo de 90 días para definir la trayectoria política fiscal de los cuatro años de Gobierno", aseguró. A sus 36 años, Boric relevó al derechista Sebastián Piñera y se convirtió este viernes en el presidente más joven y más votado de la historia del país. Para los expertos, el Gobierno de Boric supone el inicio de una nueva era política, puesto que el joven mandatario es el primer presidente que no forma parte de los dos grandes bloques de centro que gobernaron desde el retorno a la democracia en 1990 y es el más izquierdista desde Salvador Allende (1970-1973).

Guardar