Por Alan Charlish
MEDYKA, POLONIA, 24 feb (Reuters) - Ucranianos que huyen de la invasión rusa han empezado a entrar en Polonia, y el jueves llegaron decenas de ellos al normalmente tranquilo paso fronterizo de Medyka, algunos con equipaje y acompañados de niños.
Responsables de los países de la Unión Europea fronterizos con Ucrania, entre ellos Rumanía y Eslovaquia, dijeron que por ahora no había una gran afluencia de refugiados, pero medios de comunicación locales y testigos dijeron que el tráfico de personas estaba aumentando.
Alexander Bazhanov huyó de su casa en el este de Ucrania con su mujer y su hijo pequeño, llevando solo lo que podían llevar y recorriendo a pie la última parte de su viaje hasta Polonia.
Este director técnico de 34 años de Mariúpol, a 113 km de Donetsk, decidió cruzar a Polonia cuando se enteró por un colega de que la guerra había comenzado.
"No tengo más sentimientos que el de estar muy asustado", dijo Bazhanov en el paso fronterizo peatonal, a unos 400 kilómetros de Varsovia. "Voy a visitar a mi padre en España, pero no tengo dinero y no sé cómo lo haré".
Las fuerzas rusas invadieron Ucrania por tierra, aire y mar el jueves después de que el presidente Vladimir Putin autorizara una "operación militar especial" en el este.
Los países centroeuropeos que comparten frontera con Ucrania llevan semanas preparándose para una previsible avalancha de refugiados en busca de refugio en la Unión Europea.
El paso fronterizo de Medyka es utilizado en gran medida por personas que van a comprar al otro lado de la frontera o que viajan por trabajo.
Las colas para entrar en la ciudad fronteriza polaca crecieron durante la mañana. Algunas personas dijeron que temían que Rusia pudiera adentrarse más en Ucrania.
"Todo el mundo pensaba que el oeste de Ucrania era seguro porque estaba cerca de los países de la UE y la OTAN", dijo Maria Palys, de 44 años, que viajaba con su familia y la de su hermano. "Parece que no es una protección suficiente".
Rusia ha exigido el fin de la expansión de la OTAN hacia el este y Putin repitió su postura de que la adhesión de Ucrania a la alianza militar liderada por Estados Unidos sería inaceptable.
Putin dijo que había autorizado la acción militar después de que a Rusia no le quedara más remedio que defenderse de las amenazas —según él— de la Ucrania moderna, un Estado democrático de 44 millones de habitantes.
La noticia de la invasión hizo que Olga Pavlusik y su novio Bohdan Begey se apresuraran a ir a la frontera, dejando a su perro en casa en su pueblo del oeste de Ucrania. No tienen ningún destino en mente. "Cualquier lugar seguro estará bien", dijo a Reuters
(Reporte de Alan Charlish, Bryan Woolston Kacper Pempel y Leon Malherb, Redacción de Michael Kahn, Edición de Janet Lawrence, traducido por Tomás Cobos)