Muere en Chile última hablante de lengua indígena yagán

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SANTIAGO (AP) — El fallecimiento de la última hablante de la lengua indígena yagán, Cristina Calderón —de 93 años y perteneciente al pueblo originario yagán al sur de Chile— causaba conmoción en un momento en que el país trata de recuperar y valorar el aporte de los pueblos indígenas a su cultura.

La muerte de Calderón, que se produjo la víspera, aún sacudía el jueves a los chilenos. Conocer mejor a una de las diez culturas y comunidades originarias que existen es uno de los objetivos de una nueva Constitución que está por redactarse.

El reemplazo de la Carta Magna que fue impuesta hace cuatro décadas por la dictadura militar (1973-1990) fue aprobado por el 79% de los chilenos en un plebiscito el 25 de octubre de 2020. Este logro fue el resultado de un acuerdo político transversal para frenar las protestas contra la desigualdad que siguieron a un violento estallido social el 18 de octubre de 2019.

El jueves la Convención Constitucional aprobaba para el borrador de su nueva Carta Magna el principio de plurinacionalidad. De hecho, fue la hija de Calderón, Lidia González, una de las 155 constituyentes, la que dio a conocer y popularizó la noticia. “Con ella se va también parte importante de la memoria cultural de nuestro pueblo”, señaló la menor de sus nueve hijas.

“Aprendió a hablar español a los nueve años y a la vez conservó el idioma yagán. Sus hijos no aprendimos de ella por el justificado temor a ser discriminados. A pesar de ello, fue su activa difusora. Junto a Cristina Zárraga, una de sus nietas, creó un diccionario, además de un libro de leyendas e historias originarias llamado Hai Kur Mamašu Shis (Quiero contarte un cuento)”, afirmó González en una declaración pública, en la que llamó al rescate y sistematización del idioma para que no se pierda.

Calderón fue declarada Tesoro Humano Vivo por el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de Chile en 2009 como parte del patrimonio inmaterial promovido por la Unesco.

El pueblo yagán es uno de los diez pueblos originarios reconocido en Chile. Con un modo de vida tradicional nómada con actividades de caza, pesca y recolección, habitaron la parte más austral del planeta: las islas al sur de Tierra de Fuego, entre el Canal Beagle y Cabo de Hornos, soportando de forma habitual temperaturas entre -10 y -12 grados. La canoa fue su forma central de vida y la construían a partir de cortezas completas de árbol en forma de góndola.

Según el último censo de 2017 en Chile, 1.600 personas declararon pertenecer a este pueblo originario. Estas últimas familias se asientan en la zona de Puerto Williams, en el extremo sur de la patagónica región de Magallanes.

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