Por Dmitry Antonov y Pavel Polityuk
MOSCÚ/KIEV, Ucrania, 17 feb (Reuters) -Los rebeldes respaldados por Rusia y las fuerzas ucranianas se acusaron mutuamente el jueves de abrir fuego a través de la línea de alto el fuego en el este de Ucrania, y Kiev calificó los incidentes de "provocación" en un momento en que Rusia ha concentrado tropas en la frontera.
Moscú niega las acusaciones de Occidente de que está planeando invadir a su vecino y dijo esta semana que estaba retirando algunos de los más de 100.000 soldados que ha enviado a la zona. Occidente niega que se haya producido una retirada significativa y Estados Unidos dijo que seguían llegando miles de tropas más.
Los países occidentales han acusado en repetidas ocasiones a Rusia de planear un incidente en las zonas controladas por los rebeldes para justificar una invasión. Rusia, por su parte, ha acusado a Kiev de intentar provocar una escalada para recuperar el territorio rebelde por la fuerza.
Un representante del Gobierno ucraniano dijo que el bombardeo en la línea de contacto con las fuerzas separatistas respaldadas por Rusia iba más allá de la escala de violaciones del alto el fuego que se denuncian habitualmente a lo largo del conflicto.
"No es algo típico. Se parece mucho a una provocación", dijo la fuente a Reuters.
Los separatistas acusaron a las fuerzas gubernamentales de abrir fuego en su territorio en cuatro ocasiones en las últimas 24 horas.
Ucrania acusó a los rebeldes de disparar proyectiles a varios lugares, algunos impactando en un jardín de infancia y otros alcanzando un colegio en donde los alumnos tuvieron que huir al sótano.
Pese a las afirmaciones de Rusia de que se ha retirado, un alto cargo de la Administración del presidente estadounidense Joe Biden dijo que hasta 7.000 tropas más se habían trasladado a la frontera en los últimos días, incluidas algunas que llegaron el miércoles.
IMÁGENES DE SATÉLITE
El Ministerio de Defensa ruso difundió un vídeo que, según dijo, mostraba la salida de más unidades. Maxar Technologies, una empresa privada estadounidense que ha estado siguiendo la acumulación de tropas, dijo que las imágenes por satélite mostraban que, aunque Rusia ha retirado algunos equipos militares de las proximidades de Ucrania, han llegado otros.
Una fuente diplomática dijo que una misión de vigilancia de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) había registrado múltiples incidentes de bombardeo a lo largo de la línea de contacto en las primeras horas del jueves.
Desde que un alto el fuego de 2015 puso fin a los principales combates en el conflicto separatista, la OSCE ha informado habitualmente de decenas de violaciones del alto el fuego cada día, con lanzamiento de proyectiles o enfrentamientos significativos que provocan heridos o muertos varias veces al mes.
La autoproclamada República Popular de Luhansk, una de las dos regiones rebeldes, dijo que las fuerzas ucranianas habían utilizado morteros, lanzagranadas y una ametralladora en cuatro incidentes separados el jueves.
"Las fuerzas armadas de Ucrania han violado burdamente el régimen de alto el fuego, utilizando armas pesadas, que, según los acuerdos de Minsk, deben ser retiradas", dijeron los separatistas en un comunicado.
Refiriéndose a los rebeldes, los militares ucranianos dijeron: "Con especial cinismo, las tropas de ocupación rusas abren fuego en el pueblo de Stanytsa Luhansk en la región de Luhansk. Como resultado del uso de armas de artillería pesada por parte de los terroristas, los proyectiles alcanzaron el edificio del jardín de infancia".
Rusia niega estar planeando una invasión de Ucrania, pero dice que podría emprender una acción "técnico-militar" no especificada a menos que se cumplan una serie de exigencias, incluida la promesa de no admitir nunca a Kiev en la alianza de la OTAN.
Occidente ha rechazado las principales demandas rusas, pero ha propuesto negociaciones sobre el control de armas y otras cuestiones. Estados Unidos y Europa han amenazado con imponer sanciones si Rusia invade el país, lo que Moscú ha rechazado en gran medida.
(Reporte de Olzhas Auyezov/Vladimir Soldatkin/Andrew Osborn; Edición de Stephen Coates, traducido por José Muñoz y Tomás Cobos)