BUENOS AIRES (AP) — Buenos Aires le sienta de maravillas a Casper Ruud.
El noruego y número 8 del mundo se consagró bicampeón del Argentina Open, al remontar y derrotar en la tarde del domingo al defensor del título, el local Diego Schwartzman, por 5-7, 6-2, 6-3.
Ruud, quien ya había alzado el trofeo ATP 250 de la capital argentina en 2020 — el primer título en su meteórica carrera — hizo honor a su condición de máximo favorito y de especialista en arcilla: en este tipo de superficie obtuvo seis de sus siete galardones.
“Fue un muy buen partido. Diego jugó muy bien el primer set. Estábamos los dos intentando defender el título de alguna manera”, declaró Ruud, quien obtuvo su quinto trofeo consecutivo sobre arcilla.
Unos 5.000 espectadores dieron su apoyo a Schwartzman desde las gradas de la cancha Guillermo Vilas, pero la 15ta raqueta del mundo no pudo sobreponerse a un pronunciado bajón en su juego a partir del segundo set, y a la potencia y la precisión de los golpes de su rival de 23 años.
Ruud, que no conoce lo que es perder en el Buenos Aires Lawn Tennis Club, con récord de 9-0, frustró al “Peque”, que pretendía convertirse en el primer argentino en ganar en su país en años consecutivos. Además, Schwartzman buscaba su quinto título en su final número 13 en el circuito ATP.
En el historial entre ambos, el argentino de 29 años continúa arriba, ahora por 5-3.
Una tarde a pleno sol y de temperatura agradable fue el marco ideal de una excelente final de algo más de 2 horas y 34 minutos entre los dos últimos campeones del torneo.
Schwartzman sacó una luz de diferencia en la primera manga gracias a dos momentos clave. Estando 4-5 abajo, salvó un set point tras un impresionante intercambio de 42 golpes. Enseguida, el argentino quebró en el undécimo juego.
El segundo set arrancó tan cerrado como el primero, solo que esta vez Ruud supo aprovechar sus oportunidades para escaparse en el marcador: quebró para 4-2 y volvió a hacerlo dos games más tarde.
A partir de sufrir su primer quiebre, Schwartzman bajó ostensiblemente su nivel y si bien dio pelea hasta el final, terminó sucumbiendo ante un Top 10 que parece destinado a seguir subiendo en el escalafón.
Para el argentino, fue su tercera final en cuatro años en Buenos Aires. “Espero tener revancha el año próximo”, deseó tras su caída.
Más temprano en la jornada, el mexicano Santiago González y el argentino Andrés Molteni — que venían de consagrarse campeones en el Abierto de Córdoba — se apoderaron del título de dobles al imponerse por 6-1, 6-1 al italiano Fabio Fognini y el argentino Horacio Zeballos, en 46 minutos.