PARÍS (AP) — Líderes de todo el mundo se reunieron el viernes en la costa atlántica de Francia para discutir sobre la protección de los océanos de todo el planeta ante amenazas como la sobrepesca y la contaminación con plásticos, así como para encontrar formas más justas de gestionar los mares.
La Cumbre “Un Océano” se celebra mientras las autoridades europeas investigan un vertido masivo de pescado en el golfo de Vizcaya, que los activistas medioambientales califican de ejemplo de los abusos cometidos por los enormes buques de arrastre que perturban los ecosistemas submarinos.
Los océanos ocupan más del 70% de la superficie del planeta. Los científicos estiman que entre el 50% y el 80% de la vida en la Tierra se encuentra bajo la superficie del océano y que al menos el 50% del oxígeno del planeta proviene de los océanos, la mayoría producido por el plancton.
El presidente francés, Emmanuel Macron, inició la cumbre de tres días en la ciudad portuaria de Brest con el apoyo de las Naciones Unidas.
“Hoy vamos a asumir compromisos”, dijo Macron en su discurso de apertura. “Estoy convencido de que van a contribuir a reforzar medidas provechosas”.
El presidente egipcio, Abdel-Fattah el-Sissi, cuyo país acogerá este año la cumbre anual de la ONU sobre el clima; la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen; el enviado especial de Estados Unidos para el clima, John Kerry, y varios otros líderes africanos y europeos asistieron al acto en persona. Otros participaron a través de mensajes de video.
Kerry dijo que “la urgencia de la crisis en la que nos encontramos” merece atención.
“Hay actividades a gran escala que se llevan a cabo todos los días en el mar y que no se distinguen de las que realizan las grandes empresas criminales en tierra”, dijo. “Utilizan prácticas espantosas de trabajo, lavado de dinero y fraude para destruir los esfuerzos valiosos de los pescadores de todo el mundo que intentan vivir siguiendo las normas”.
Se estima que la actividad ilegal representa una quinta parte de la pesca mundial.
La pesca clandestina está “agotando las poblaciones de peces del mundo, al arrastrar, de forma literal, redes que prohibimos hace varios años... y tirando dos tercios de lo que capturan”, señaló Kerry. “Creamos zonas marinas protegidas, pero no las hacemos respetar”.
Estados Unidos y Francia reconocieron en una declaración conjunta “los aspectos transfronterizos de la contaminación por plásticos y la importancia de frenarla en su origen”.
Pero el grupo ecologista Greenpeace lamentó que la cumbre se llene de declaraciones políticas “que siguen siendo vagas en muchos temas”.
“Las declaraciones van en la dirección correcta, pero ahora es necesario ir más allá: esperamos medidas concretas”, declaró Francois Chartier, responsable de océanos de Greenpeace Francia.