BEIJING, 11 feb (Reuters) -Estados Unidos podría procesar a los deportistas olímpicos rusos implicados en el caso de dopaje de Kamila Valieva en virtud de la norma estadounidense conocida como "ley Rodchenkov" (RADA, por sus siglas en inglés), dijo el viernes a Reuters el jefe de la Agencia Antidopaje de Estados Unidos, Travis Tygart.
La norma, fue ratificada como ley en EEUU en 2020, faculta a la fiscalía estadounidense a pedir multas de hasta un millón de dólares y penas de cárcel de hasta 10 años, incluso para los deportistas no estadounidenses, si sus acciones afectan a los resultados de los atletas del país.
La adolescente rusa Valieva ganó la medalla de oro el lunes, pero la Agencia Internacional de Pruebas (ITA, por sus siglas en inglés) dijo el viernes que no superó un control antidopaje. Estados Unidos ganó la plata y Japón el bronce.
Las autoridades olímpicas impugnarán la decisión de Rusia de permitirle competir en los Juegos de Invierno de Pekín.
"La ley se ha utilizado para proteger unos Juegos Olímpicos", dijo Tygart, refiriéndose a los Juegos de Tokio del año pasado. "Se va a utilizar para proteger otros Juegos Olímpicos siempre que siga habiendo gente que se dope".
"No se puede manipular. Nos enfrentamos a una zona en penumbra. Los atletas limpios se merecen algo mejor, y esta pobre joven se merece algo mejor. La están machacando (con el dopaje) además de estar siendo sometida al abuso del sistema estatal ruso".
La RADA otorga a las autoridades estadounidenses el poder de perseguir penalmente a personas por tramas de dopaje en eventos internacionales en los que participen atletas, patrocinadores o emisoras estadounidenses.
Lleva el nombre de Grigory Rodchenkov, exjefe del laboratorio antidopaje ruso que se convirtió en denunciante y ayudó a sacar a la luz el caso de dopaje presuntamente promovido por el Estado ruso tras los Juegos de Invierno de 2014 de Sochi.
Rusia ha reconocido algunas deficiencias en la aplicación de las normas antidopaje, pero niega haber llevado a cabo un programa de dopaje patrocinado por el Estado.
MOMENTO ÁLGIDO
Valieva protagonizó uno de los momentos más destacados de los Juegos de Pekín hasta ahora al realizar el lunes el primer salto cuádruple de una mujer en una competición olímpica.
Sin embargo, su sueño olímpico se convirtió en una pesadilla el viernes, cuando la ITA reveló públicamente que había dado positivo por el fármaco prohibido para la angina de pecho Trimetazidina en una muestra de orina recogida por las autoridades rusas en los campeonatos nacionales de San Petersburgo el 25 de diciembre.
El laboratorio de análisis en Estocolmo informó el martes de que su muestra era positiva, un día después de que asombrara al mundo y ayudara a ganar el oro a su equipo, que compite como Comité Olímpico Ruso (ROC, por sus siglas en inglés) debido a las sanciones por dopaje.
No quedó claro por qué hubo tanto retraso entre la realización de su prueba y el resultado, que le permitió viajar a Pekín y participar en la primera de sus dos competiciones.
"Quienquiera que se ocupara de ello, sencillamente debería haberlo agilizado", dijo Tygart. "No es tan difícil de hacer. Un retraso de cinco semanas por una sustancia como ésta no debería haber ocurrido".
"Es un fallo catastrófico del sistema permitir a la estrella de los Juegos que su muestra no se comunique durante cerca de cinco semanas, y que luego se comunique al día siguiente de ganar la prueba por equipos".
"No se debería estar en un Gobierno o en un deporte y (poder) dopar a los atletas sin que haya consecuencias. Es exactamente lo que ocurrió con el dopaje de Estado, y por eso se aprobó la Ley Rodchenkov. Es la única manera de abordar este comportamiento", afirmó Tygart.
"Muchos de nosotros nos sentimos decepcionados por el dopaje patrocinado por el Estado (en Rusia) que salió a la luz allá en 2015, por el hecho de que quienes orquestaron y conspiraron para abusar de los jóvenes atletas (...) no rindieron cuentas por su deporte ni por sus propios gobiernos".
Los atletas rusos que participan en los Juegos no compiten bajo su bandera y su himno no suena en ninguna de las ceremonias, tras las sanciones impuestas por el dopaje generalizado en muchos deportes que se puso de manifiesto tras los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014 en Sochi.
Está previsto que las sanciones se levanten a finales de año, pero el director de la Agencia Mundial Antidopaje advirtió a principios de este mes que Rusia no debe dar por hecho que esto ocurrirá automáticamente.
(Informado de Iain Axon; escrito por Ossian Shine; editado por Ken Ferris; traducción de Darío Fernández)