El Centro de Instrumentación y Registro Sísmico de México (Cires) informó de un temblor de magnitud 3.5 cerca de Vicente Guerrero, al ser las 3:54 en el horario local (9:54 UTC). Con una profundidad de 12 kilómetros, fue percibido como muy ligero por los habitantes de la localidad.
La afectación en víctimas humanas y daños materiales a causa de este movimiento telúrico sigue sin establecerse, dado lo reciente del evento.
México se encuentra en una zona de alta actividad geológica, que lo expone al riesgo constante de sufrir este tipo de eventos. Prueba de lo anterior fueron los sismos de 1985 y 2017, que causaron grandes daños. Pese a ser de los más presentes en la memoria tanto de nacionales como de extranjeros, no fueron los de mayor magnitud.
El 28 de marzo de 1787, un Oaxaca colonial se vio estremecido por el que ha sido el terremoto más fuerte registrado en México hasta ahora. Con una magnitud de 8.6, fue seguido de un tsunami que se adentró 6 kilómetros más allá de la costa.
De acuerdo con los datos del Centro de Instrumentación y Registro Sísmico (Cires), realizados en 2009 sobre el terremoto citado, existe la posibilidad de una repetición de eventos por encima de dicha magnitud. Se estima que pueden ocurrir en los años venideros. Su epicentro se calcula en las costas de México y Centroamérica, ya que estas se encuentran en la denominada Brecha de Guerrero. Dicha zona se caracteriza por la acumulación de gran cantidad de energía geológica.
Terremotos como el de este día traen a la memoria de los mexicanos los peores recuerdos de 1985 y 2017, cuando toda Ciudad de México se paralizó ante las impactantes consecuencias que dejó cada uno.
El 19 de septiembre de 1985 sucedió un terremoto de magnitud 8.2, con epicentro en el estado de Guerrero. Eran las 07:19 horas locales (13:19 GMT). En aquel momento, se pensó que no habría más terremotos de tales dimensiones, mas un evento afín aconteció exactamente 32 años después.
En 2017, sucedió a las 13:14 horas locales (18:30 GMT), con epicentro en una zona entre los estados de Puebla y Morelos. Entonces, las víctimas mortales llegaron a 369 personas.