ROMA (AP) — El Vaticano informó el viernes que firmó un contrato para vender un lujoso edificio residencial en Londres que está en el centro de un juicio por fraude y malversación en el tribunal estatal de la Santa Sede. Aseguró que recuperará más de lo que esperaba de una inversión que dio pérdidas.
Al dar a conocer el presupuesto oficial de la Santa Sede para 2022, el ministerio de Hacienda dijo que ha recibido el 10% del depósito y que espera concluir la venta en junio. El presupuesto prevé una reducción del déficit de la Santa Sede a 33 millones de euros (37 millones de dólares) comparado con 42 millones de euros el año pasado.
El titular del ministerio, el padre Juan Antonio Guerrero Alves, dijo a la prensa vaticana que la pérdida ocasionada por el edificio en Londres ya está incluida en los balances. No dio a conocer el precio final de venta de la propiedad ni otras cifras, pero Guerrero dijo que se vendió por arriba de su precio de valuación.
La compra del edificio situado en el número 60 de la avenida Sloan, en el barrio londinense de Chelsea, ha sido una de las manchas más negras en las finanzas vaticanas en los últimos años. La secretaría de Estado invirtió unos 350 millones de euros, provenientes en buena medida de donaciones de los fieles, para adquirir un inmueble cuyo dueño anterior lo había adquirido por menos de la mitad: 129 millones de libras.
El escándalo puso de manifiesto la incompetencia de los monseñores del Vaticano para manejar sus arcas, ya que en el acuerdo entregaron acciones con derecho a voto y aceptaron pagar honorarios exorbitantes e innecesarios a italianos conocidos en el mundo financiero por sus negocios turbios.
Los fiscales del Vaticano han acusado al gerente financiero de la Santa Sede, empresarios inmobiliarios y abogados italianos de esquilmarle las arcas en los diversos vericuetos de la transacción y de extorsionarlo por 15 millones de euros para obtener la plena propiedad del inmueble, un antiguo depósito de la gran tienda Harrods.