BERLÍN (AP) — El ultraderechista partido Alternativa para Alemania presentó el martes a un miembro de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de la excanciller Angela Merkel como su candidato para convertirse en el próximo presidente del país, lo que llevó a su propio partido a pedirle que se marche o arriesgue ser expulsado.
Max Otte, un economista de derecha que anteriormente formaba parte de un grupo de reflexión cercano a Alternativa para Alemania (AfD por su acrónimo en alemán), se convirtió el año pasado en el jefe de la Werte-Union, un grupo que se describe como representante de los miembros conservadores de la CDU pero que no está formalmente vinculado al partido.
En años recientes, los líderes de la CDU han tenido dificultades en elaborar una estrategia para lidiar con la Werte-Union, que es políticamente minoritaria pero que ha ganado notoriedad.
Otte apareció el martes junto a dos líderes de AfD. Dijo que había aceptado como “un gran honor” su nominación para desafiar al presidente Frank-Walter Steinmeier cuando el 13 de febrero se reúna una asamblea especial que elegirá un jefe de Estado para los próximos cinco años.
Steinmeier tiene una clara candidatura a un segundo mandato porque cuenta con el respaldo de la mayoría de los partidos principales: los tres del gobierno del canciller Olaf Scholz más el principal bloque opositor de la Unión, dominado por la CDU. Ni Otte ni el candidato del Partido de la Izquierda, el médico Gerhard Trabert, tienen ninguna posibilidad real durante la asamblea de los 736 miembros de la cámara baja del Parlamento y un número igual de representantes de los 16 estados de Alemania.
Sin embargo, la nominación de Otte es incómoda para la CDU y figuras prominentes pidieron su salida o expulsión. El líder entrante, Friedrich Merz, ha descartado enérgicamente cualquier cooperación con AfD, al igual que sus predecesores.