México, 25 ene (EFE).- El serbio Novak Djokovic, primero del ránking mundial, tiene las puertas abiertas para jugar en febrero el Abierto de Acapulco, torneo 500 de la ATP, y no tendría que vacunarse contra la COVID-19. El director del torneo, Raúl Zurutuza, aseguró este martes que han sido respetuosos con los tiempos del mejor jugador del mundo y no lo han buscado, pero señaló que si desea jugar en Acapulco, como hizo en 2017, será bienvenido. "Novak tiene su agenda; si quiere venir, la relación es muy buena; prefiero que sea una decisión suya, aunque lo veo complicado porque una semana después habrá Copa Davis", indicó. Djokovic fue apartado del primer Grand Slam del año, el Abierto de Australia, por no estar vacunado, pero no tendría problemas para viajar a Acapulco porque el Gobierno mexicano no restringe la entrada al país a los no inmunizados y el torneo se rige por eso. En su única participación en el Abierto de México, en 2017, Djokovic fue eliminado en los cuartos de final por el australiano Nick Kyrgios. El año pasado, el Abierto de Acapulco lo ganó Alexander Zverev, al derrotar por 6-4, 7-6 (3) a Stefanos Tsitsipas.