El Congreso de Honduras elige este viernes a su junta directiva provisional en medio de una crisis política después de que 20 miembros del partido ganador de las presidenciales de noviembre se rebelaran contra la presidenta electa, la izquierdista Xiomara Castro.
Castro, que ganó las elecciones del pasado 28 de noviembre al candidato del Partido Nacional (PN, derecha), Nasry Asfura, convocó a una reunión celebrada la noche del jueves a los 50 diputados de su partido, Libertad y Refundación (Libre, izquierda), para pedirles que apoyaran al legislador Luis Redondo como presidente del Legislativo, pero 20 no asistieron al encuentro.
"La ausencia de los veinte diputados es el augurio de una traición contrarrevolucionaria al partido y al pueblo hondureño que derrocó la narcodictadura nacionalista (del Partido Naciona), el 28 de noviembre, y una traición al proyecto político de la refundación de la patria, al intentar (...) imponer un plan de la élite corrupta que dirige (el expresidente) Juan Orlando Hernández", sentenció la presidenta electa al leer un comunicado.
En una alianza formada en octubre pasado, Libre, coordinado por Manuel Zelaya, esposo de Castro y expresidente, pactó con el entonces candidato del Partido Salvador de Honduras (PSH), Salvador Nasralla, que en caso da ganar las presidenciales le nombraría vicepresidente y le permitiría elegir al presidente del Congreso.
El Congreso está integrado por 128 diputados: 50 de Libre, 10 del PSH, 44 del Partido Nacional, 22 del Partido Liberal (PL, también derecha) y uno cada uno de dos partidos minoritarios.
Para la elección de la directiva de Congreso se requieren 65 escaños. Los diputados del PN dijeron que no habían decidido el jueves a quién apoyar.
Pero el grupo de 20 diputados de Libre pretende incumplir el acuerdo y propone como candidato a presidente del Legislativo al integrante de su bancada Jorge Calix, en contra de la voluntad de la primera mujer en llegar a la presidencia de Honduras.
"La presidenta constitucional Xiomara Castro ha manifestado que no admite el incumplimiento y la traición al voto del pueblo que la eligió en forma contundente en Alianza", sentenció la mandataria electa.
Castro se mostró contraria a "incumplir y traicionar el acuerdo constitucional" ni "hacer alianzas con los representantes del crimen organizado, la corrupción y el narcotráfico" del PN, subrayó.
Junto con otros altos cargos como el presidente del Congreso, Castro juramentará como presidenta el 27 de enero en una ceremonia que se celebrará en el Estadio Nacional de Tegucigalpa y a la que asistirán autoridades de varios países, entre ellos la vicepresidenta de Estados Unidos Kamala Harris.
nl/dga