ALBANY, Nueva York, EE.UU. (AP) — La mujer que acusó al exgobernador de Nueva York Andrew Cuomo de manosearla declaró que la decisión de la fiscalía de abandonar el caso demuestra por qué las víctimas son renuentes a alzar la voz contra figuras poderosas.
Brittany Commisso, quien fue asistente ejecutiva de Cuomo antes de que éste renunciara en agosto, divulgó un comunicado el martes, horas después que el fiscal general de Albany anunció que no seguiría adelante con el caso porque, según él, si bien la denuncia es creíble, no era posible demostrarla sin lugar a dudas.
“Mi decepcionante experiencia, al ser revictimizada, al ver que las autoridades no procesan a un abusador sexual empedernido, no importa el nivel del delito cometido, demuestra otra vez, lamentablemente, la razón por la cual muchas víctimas se inhiben de alzar la voz, especialmente cuando se trata de figuras poderosas”, expresó Commisso en el comunicado enviado al diario Times Union of Albany.
“¿Cuándo se escucharán nuestras voces? ¿A dónde debemos ir para hacer respetar nuestros derechos? Desafortunadamente este es otro ejemplo de cómo nuestro sistema de justicia tiene que hacer mejor las cosas”, añadió.
El fiscal general de Albany David Soares le solicitó al juez desestimar la acusación de contacto físico forzado que pesaba contra Cuomo. Soares indicó que, si bien Commisso cooperó plenamente y su denuncia era creíble, no había manera de demostrar el delito más allá de toda duda.
Cuomo ha rechazado la acusación, y no se ha pronunciado sobre la más reciente decisión.
Dijo Commisso: “A toda víctima que sufre en silencio del acoso sexual por parte de un funcionario poderoso, a todas las que se preguntan qué pasará si dicen la verdad, por favor, no dejen que lo que me pasó a mí las inhiba de alzar la voz”.