Por Jill Serjeant
LOS ÁNGELES, 20 dic (Reuters) - No hay pizza ni regaliz en la última película del director Paul Thomas Anderson, pero como muchos de los extravagantes personajes y acontecimientos de su historia de madurez ambientada en los suburbios de Los Ángeles de los años setenta, algo en el título parecía correcto.
"Licorice Pizza es en realidad una famosa tienda de discos del Valle de San Fernando que era muy popular en los años 70", dice Alana Haim, la músico que debuta en la pantalla como la ingeniosa pero espinosa joven que protagoniza la historia. La película llega a los cines de Estados Unidos el 25 de diciembre.
"Tardamos un segundo en saber cómo íbamos a llamar a la película. En el momento en que 'Licorice Pizza' estuvo en la edición, todos nosotros sentimos en nuestras entrañas que éste era el título", dijo Haim, de 29 años.
Reconocida por la crítica como el filme más divertido y personal de los 30 años de carrera de Anderson, "Licorice Pizza" figura en varias listas de las mejores películas de 2021 y se espera que obtenga un buen resultado en los Oscar del próximo año.
El filme sigue la relación poco convencional entre el personaje de Haim, ayudante de fotógrafo, y un empresario en ciernes de 15 años interpretado por Cooper Hoffman, hijo del fallecido actor Philip Seymour Hoffman.
Sean Penn y Bradley Cooper hacen apariciones como grandes figuras durante un verano de travesuras que involucra camas de agua, máquinas de pinball, escasez de gasolina, política local y el primer amor.
Haim, quien junto a sus dos hermanas forma la banda de rock Haim, describió su personaje como "feroz y fuerte y (ella) como si supiera todo sobre el mundo, pero no sabe absolutamente nada".
"Es muy complicada", añadió Haim.
(Editado en español por Benjamín Mejías Valencia)