Por Howard Schneider
WASHINGTON, 15 dic (Reuters) -La Reserva Federal de Estados Unidos, que apuntó a que se alcanzó su meta de inflación, dijo el miércoles que pondrá fin a sus compras de bonos de la era de la pandemia en marzo, allanando el camino para tres alzas de tasas de interés de un cuarto de punto en 2022, su vía de salida a las políticas que adoptó al comienzo de la crisis sanitaria.
En las nuevas proyecciones económicas para Estados Unidos, publicadas al término de una reunión de política monetaria de dos días, los funcionarios prevén que la inflación seguirá siendo del 2,6% el próximo año, frente al 2,2% previsto en septiembre, y que la tasa de desempleo bajará al 3,5%, cerca si no excediendo el pleno empleo.
Como resultado, la mediana de las autoridades de la Fed proyectaron que la tasa de interés de referencia a un día tendría que aumentar desde su actual nivel cercano a cero a 0,9% para finales del 2022, con alzas que continuarán en 2023 a un 1,6% y en 2024 a un 2,1%, para tratar de llevar la inflación de nuevo al objetivo del banco central del 2%, cerca pero sin exceder un nivel que restrinja la actividad económica.
"La economía ya no necesita cantidades crecientes de apoyo de política monetaria", dijo el presidente de la Fed, Jerome Powell, en una conferencia de prensa tras la reunión. "En mi opinión, estamos avanzando rápidamente hacia el máximo empleo".
El escenario planteado por la Fed es, a grandes rasgos, un "aterrizaje suave", con una inflación que se suaviza gradualmente en los próximos años mientras el desempleo se mantiene bajo en una economía en crecimiento.
El momento de la primera subida, dijo el banco central, dependerá ahora únicamente de la trayectoria de un mercado laboral que se espera que siga mejorando en los próximos meses.
En el último comunicado de política monetaria se eliminó cualquier referencia a la inflación como "transitoria", y en su lugar la Fed reconoció que el aumento de los precios había superado su objetivo del 2% "durante algún tiempo".
La inflación anual ha sido más del doble del objetivo de la Fed en los últimos meses.
Para abrir la puerta a las subidas de tasas, la Reserva Federal anunció que iba a duplicar el ritmo de su "reducción" de la compra de activos, con lo que se encamina a poner fin a las compras de bonos del Tesoro y valores respaldados por hipotecas (MBS) en marzo.
Hasta hace poco, el banco central había estado comprando 120.000 millones de dólares de bonos del Tesoro y MBS cada mes para ayudar a impulsar la recuperación económica.
NORMALIZANDO LA POLÍTICA MONETARIA
Aunque la Fed hizo que cualquier alza de tasas dependa de alguna mejora adicional en el mercado laboral, las nuevas proyecciones dejaron pocas dudas de que los costos de crédito aumentarán el próximo año, en ausencia de un shock económico importante. Las 18 autoridades del banco central consideraron que sería necesaria al menos un alza el próximo año.
Con todo, las nuevas proyecciones y declaraciones comenzaron a precisar el plan del banco central para "normalizar" la política monetaria luego de casi dos años de esfuerzos extraordinarios para ayudar a la economía a superar las consecuencias de la pandemia.
Sin embargo, el camino aún sigue abierto por la nueva variante ómicron del coronavirus, que ha añadido incertidumbre sobre el curso de la economía.
Pero la Fed, en este punto, dijo que se espera que el crecimiento económico sea de un 4% próximo año, un aumento sobre las proyecciones de un 3,8% de septiembre y más del doble de la tendencia subyacente.
(Reporte de Howard SchneiderEditado en español por Javier López de Lérida)