La suspensión de todos los torneos de la WTA en China debido a las preocupaciones por la seguridad de Peng Shuai, quien acusó de abuso sexual a un ex alto funcionario del gobernante Partido Comunista, podría extenderse más allá de 2022, declaró el director del circuito a The Associated Press.
“Estamos preparados, de mantenerse la situación como está — la cual no ha sido productiva hasta el momento — que no estaremos operando en la región”, dijo Steve Simon, director ejecutivo del circuito WTA, en una video llamada desde California. “Se trata de un trabajo organizacional para resolver un tema entre lo que está bien y lo que está mal”.
Comentó que la medida de cancelar sus torneos en China, incluido Hong Kong, se da con el respaldo de la junta directiva de la WTA, las jugadoras, los torneos y los patrocinadores. Es la postura pública más fuerte en contra de China adoptada por un organismo deportivo — una que podría costarle a la WTA millones de dólares.
Peng desapareció de la vista del público tras acusar a un exmiembro del Comité Permanente del Partido Comunista, Zhang Gaoli, de abuso sexual en un mensaje en una plataforma online. El mensaje, publicado el 2 de noviembre, fue borrado inmediatamente por las autoridades chinas.
“Nuestra postura al respecto y nuestra solicitud ante las autoridades son consistentes y seguirán así. Definitivamente queremos tener nuestra propia discusión con Peng y sentirnos cómodos sabiendo que ella realmente está libre y a salvo, saber que no ha sido censurada, intimidada o algo por el estilo”, le dijo Simon a AP.
“Desafortunadamente, las autoridades en China no han atendido este grave asunto de una manera creíble", dijo Simon, en un comunicado difundido por la gira. “Si bien ya sabemos del paradero de Peng, tengo serias dudas sobre si está en libertad”.
Simon reiteró su pedido para que se realice una “investigación completa y transparente — sin censura” sobre las acusaciones de Peng. La gira ha adoptado una inusual postura firme hacia China, país que se suponía iba a ser sede de varios torneos el año próximo. Una de esas citas son las Finales de la WTA, el prestigioso certamen de final de temporada.
“Con la consciencia tranquila, no veo como pedirle a nuestras jugadoras que compitan ahí cuando Peng Shuai no tiene permitido comunicarse libremente y aparentemente está siendo presionada para desmentir sus acusaciones de agresión sexual”, indicó Simon. “Dado el actual estado de la situación, estoy muy preocupado sobre los riesgos que podrían enfrentar las jugadoras y personal si realizamos torneos eventos en China en el 2022”.
China suele ser sede de 10 torneos de la gira femenina cada año. Las Finales de la WTA es una de esas citas, en agenda durante una década. El país inyecta miles de millones a diversos entes y ligas deportivas, como la WTA, la NBA y el Comité Olímpico Internacional.
“Aplaudo a Steve Simon y a los líderes de la WTA por adoptar una posición firme en cuanto a la defensa de los derechos humanos en China y alrededor del mundo", dijo Billie Jean King, pionera del tenis femenino y miembro del Salón de la Fama. “La WTA decidió ponerse del lado correcto de la historia al defender los derechos de nuestras jugadoras. Esta otra muestra de que el tenis está a la vanguardia en el deporte femenino”.
Beijing recibirá los Juegos Olímpicos de Invierno, a partir del 4 de febrero. El presidente del COI, Thomas Bach, dijo el mes pasado que habló con Peng a través de una videollamada de media hora de duración, reportando que la tenista se “encontraba bien”.
“Esto volvió a confirmarse en la llamada de ayer", dijo el COI el jueves al revelar que sus representantes tuvieron otra videollamada con Peng el miércoles. “Nuestro enfoque humano y centrado en la persona significa que seguiremos atentos a su situación personal y continuaremos apoyándole”.
Otra vez, el COI no divulgó el video o transcripción de la conversación. Tampoco explicó como se organizó la llamada.
El COI insistió el jueves en su estrategia de “diplomacia silenciosa” para lidiar con otros dirigentes deportivos que “dadas las circunstancias y basada en la experiencia de los gobiernos y otras organizaciones, es la manera más prometedora de responder con eficacia en estos asuntos humanitarios”.
Voces detractoras han sugerido que Peng no habría llamado al COI si realmente tuviera libertad para hablar.
Varios empresarios, activistas y otros ciudadanos chinos han desaparecido en años recientes tras criticar a personeros del Partido Comunista o al reprimir la corrupción o campañas pro democracia y derechos humanos.
“Si los poderosos pueden reprimir las voces de las mujeres y esconder las acusaciones de agresión sexual, entonces la base con la que se fundó la WTA — equidad para las mujeres — recibirá un gran golpe”, dijo Simon. “No dejaré y no puedo dejar que eso pase con la WTA y sus jugadoras”.
Cuando se le preguntó dos veces sobre la decisión de la WTA y la situación de Peng, el portavoz del ministerio de relaciones exteriores chino, Wang Wenbin, se negó a responder a ambos temas.
“Siempre nos hemos opuesto con firmeza a actos que politizan el deporte", dijo Wang en una cortante respuesta a los periodistas.
En un tuit, el editor del Global Times, el diario de línea dura del Partido Comunista, criticó a la WTA por “forzar a Peng Shuai para que respalde la agresión del Oeste al sistema chino”. Como otras plataformas de redes sociales de los países occidentales, Twitter está bloqueda en China.
La inquietud generada tras la censura del mensaje y la subsecuente desaparición de la vista pública acabó en furor. La etiqueta #WhereIsPengShuai se viralizó en las redes sociales y captó el respaldo de estrellas del tenis como Serena Williams, Naomi Osaka, Roger Federer, Rafael Nadal y Martina Navratilova.