GINEBRA (AP) — Detractores del intento de la FIFA de realizar una Copa del Mundo cada dos años temen perder su lugar en la cima del fútbol mundial, indicó el presidente del organismo, Gianni Infantino, el viernes.
El discurso de Infantino ante los líderes del fútbol africano incluyó una crítica directa a Europa y Sudamérica, continentes que han dominado los Mundiales y han amenazado con boicotear un torneo bienal en la rama varonil.
“Quienes se oponen son los que están en la cima”, dijo Infantino a funcionarios de las 54 naciones que conforman la Confederación Africana de Fútbol que se reúne en El Cairo.
“Eso sucede en cada sector de la vida, cuando hay reformas y cambios, quienes están en la cúspide no quieren que nada cambie”, declaró Infantino, quien por mucho tiempo fue un funcionario sénior de la UEFA antes de ser electo presidente de la FIFA en 2016. “Tiene miedo, quizá, de que si algo cambia su posición al frente esté en riesgo”.
Europa y Sudáfrica han aportado a las selecciones que han disputado todas las 21 finales de Copa del Mundo desde la primera en 1930, y su dominio histórico les ha otorgado al menos 18 de los 32 lugares para la edición 2022 del Mundial en Qatar.
“Lo comprendemos, y los elogiamos y aplaudimos por ser tan exitosos en llegar a la cumbre”, agregó Infantino. “Eso es fantástico y son un ejemplo para todos. Pero al mismo tiempo no podemos cerrar las puertas (a los otros)”.
Ninguna selección africana ha llegado a las semifinales del Mundial de hombres y el continente solo cuenta con cinco de los 32 lugares en el torneo. Esa cifra crecerá al menos a nueve cuando el torneo implemente su formato de 48 selecciones en 2026.
Infantino ha presionado por un Mundial bienal que ayude a otras regiones a desarrollarse y cerrar la brecha —al darle a otras naciones más oportunidades para clasificar y a los jugadores más oportunidades de competir en el mayor escenario del fútbol a nivel mundial.
Una Copa del Mundo de hombres extra en un ciclo de cuatro años añadiría alrededor de 3.000 millones de dólares a los ingresos de la FIFA e incrementaría el apoyo a sus 211 federaciones miembro y sus seis organismos continentales.
“Es nuestra responsabilidad mantener el sueño vivo para darle oportunidad a todos", sostuvo el líder de la FIFA.