BERLÍN (AP) — El dirigente alemán de centroizquierda Olaf Scholz dijo el miércoles que tres partidos han acordado formar un nuevo gobierno que pondrá fin a la era de Angela Merkel.
Scholz, dirigente del Partido Socialdemócrata, dijo que el nuevo gobierno no buscará el “mínimo común denominador sino la política de grandes impactos”.
Destacó la importancia de una Europa soberana, la amistad con Francia y la asociación con Estados Unidos como las piedras angulares de la política exterior, acorde con toda la tradición de posguerra.
Scholz espera que los miembros de los partidos aprueben el acuerdo en los próximos 10 días.
Los socialdemócratas iniciaron negociaciones con los ambientalistas del partido Verde y los Demócratas Libres de centroderecha desde que ganaron por estrecho margen la elección general del 26 de setiembre.
Si lo aprueban los miembros del partido, la triple alianza —que jamás se ha puesto a prueba en un gobierno nacional— sucederá a la actual “gran coalición” de los partidos tradicionales. Los socialdemócratas han sido socios menores de los demócratas cristianos de Merkel.
Scholz, de 63 años, ministro de Hacienda y vicecanciller desde 2018, sucedería a Merkel, quien no se postuló a un quinto período.
Los tres partidos aspirantes al gobierno han expresado la esperanza de que el parlamento elija a Scholz canciller en la semana que comienza el 6 de diciembre. Pero antes de ello el acuerdo deberá ser aprobado por los aproximadamente 125.000 afiliados del partido Verde y los congresos de los otros dos partidos.
La noticia del acuerdo llegó cuando Merkel presidía la que probablemente será su última reunión de gabinete. Scholz le presentó un ramo de flores a la política de 67 años, jefa del gobierno desde 2005.
Las negociaciones para formar la alianza fueron relativamente armoniosas y rápidas comparado con otras anteriores. Pero la transición política, con Merkel como canciller interina, ha obstaculizado la respuesta alemana al pico del coronavirus.
Se han conocido escasos detalles de las conversaciones a puertas cerradas, incluso el reparto de las carteras ministeriales. La alianza es una mezcla potencialmente incómoda porque reúne a dos partidos tradicionalmente de izquierda con los Demócratas Libres, que tienden a aliarse con la centroderecha.
Un acuerdo preliminar el mes pasado indicó que Alemania adelantará los plazos para poner fin al uso del carbón como fuente energética, de 2038 a 2030, a la vez que acelera el desarrollo de las fuentes renovables.
Ante la insistencia de los Demócratas Libres, los socios dijeron que no elevarán los impuestos ni mitigarán los límites al endeudamiento, por lo que las finanzas se convierten en un asunto central.
Los Demócratas Cristianos se han embarcado en una contienda para elegir a quien sucederá a Merkel como dirigente para revivir a un partido que acaba de sufrir el peor resultado electoral de su historia.