KIEV (AP) — Las autoridades bielorrusas afirman que han ayudado a más de 100 migrantes a dejar el país el lunes y que más están preparados a salir el martes, en una declaración que llega luego de casi dos semanas de tensiones en la frontera con Polonia, donde centenares de personas siguen varadas.
Funcionarios del ministerio del Interior dijeron que 118 migrantes volaron el lunes desde Minsk, la capital, a sus países luego que las autoridades “les asistieron con documentación y el cruce de la frontera estatal”.
Las autoridades realizan ese trabajo “diariamente” y se espera que el martes otro grupo deje el país, indicó Alexei Begun, jefe del departamento de ciudadanía y migración del ministerio. Begun no mencionó las nacionalidades ni los países hacia los que salieron los migrantes.
La semana pasada, más de 400 iraquíes dejaron Bielorrusia en un vuelo de evacuación organizado por Irak.
Desde el 8 de noviembre, un grupo grande de personas, mayormente del Oriente Medio, han estado varadas en Bielorrusia en un cruce fronterizo con Polonia, atrapadas en una confrontación entre fuerzas de los dos países. La mayoría escapan de conflictos y situaciones desesperadas en sus países y buscan llegar a Alemania u otras naciones occidentales.
Occidente acusa al presidente de Bielorrusia Alexander Lukashenko de atraer a los migrantes a la frontera para usarlos como peones para desestabilizar la Unión Europea en represalia por sanciones contra su gobierno autoritario. Bielorrusia niega haber orquestado la crisis, en la que numerosos migrantes han entrado al país desde el verano y entonces tratado de cruzar a Polonia, Lituania y Letonia.
Unas 2.000 personas están actualmente en un almacén cerca de la frontera con Polonia. Lukashenko ha dicho que un total de 7.000 migrantes siguen en el país.
El portavoz de los servicios de seguridad de Polonia, Stanislaw Zaryn, estima que alrededor de 10.000 migrantes están en estos momentos en Bielorrusia.