Ford y la Universidad Purdue se han asociado para desarrollar un nuevo cable de estación de carga compatible con tecnología de carga de vehículos en desarrollo con la esperanza de posibilitar una transición más amplia a los vehículos eléctricos.
Los investigadores de Purdue intentan desarrollar un método de enfriamiento alterno para evitar el sobrecalentamiento de la batería con un cable de carga que puede suministrar una mayor corriente. El cable usa líquido como un agente de enfriamiento activo, que puede ayudar a extraer más calor del cable.
De funcionar correctamente, suministraría mucho más energía que la actual tecnología usada para recargar vehículos eléctricos, lo que potencialmente aceleraría el proceso si se usa con tecnología que se desarrolla actualmente.
Los investigadores afirman que los tiempos de carga de los vehículos eléctricos eventualmente podrían estar al nivel del llenado de un tanque en una gasolinera.