Cada europeo genera anualmente 34,4 kilos de residuos de envases de plástico

Guardar
Imagen de archivo de operarios en un camión de recogida de residuos ante un contenedor amarillo. EFE/Javier López/ra
Imagen de archivo de operarios en un camión de recogida de residuos ante un contenedor amarillo. EFE/Javier López/ra

Bruselas, 27 oct (EFE).- Cada ciudadano europeo generó en 2019 una media de 34,4 kilos de envases de plástico, según datos difundidos este miércoles por Eurostat, que indica que el 41 % de esos productos se reciclaron, es decir, unos 14,1 kilos por habitante.
La oficina de estadística comunitaria señaló en un comunicado que entre 2009 y 2019 el volumen de residuos de envases de plástico en la UE por habitante aumentó un 24 %, lo que se traduce en 6,7 kilos, si bien la tasa de reciclaje de esos materiales avanzó aún más rápido, hasta en un 50 %, que supone 4,7 kilos más.
"A pesar de esta mejora, la cantidad de envases plásticos que no se reciclaron aumentó en 2 kilos por habitante desde 2009 debido al mayor incremento en el valor absoluto de los residuos de envases plásticos generados", señaló Eurostat.
La media comunitaria de reciclaje de esos envases por habitante fue del 41 %, aunque con diferencias extremas entre el 70 % de Lituania y el 11 % de Malta (este último con datos de 2018).
Además del citado país báltico, se situaron por encima de la media de la UE Chequia (61 %), Bulgaria (59 %, con datos de 2018), Países Bajos (57 %), Suecia y Eslovaquia (ambos 53 %), España (52 %), Chipre (51 %) y Eslovenia (50 %).
En cambio, además de Malta, los que obtuvieron peores tasas de reciclaje de envases plásticos por habitante fueron Francia (27 %), Irlanda (28 %), Austria (31 %), Polonia (32 %) y Hungría (33 %).
La UE se dotó en 2018 de un nuevo marco jurídico, aún en fase de implementación, para avanzar hacia una economía más circular, que aspira a que la UE recicle en 2025 el 50 % de los envases de plástico que se utilizan y el 55 % en 2030, es decir, el doble que lo estipulado en la normativa de 1994.
Una de las medidas más contundentes de la UE para atajar el problema es una contribución nacional de 0,8 euros por kilo basada en la cantidad de residuos de envases de plástico no reciclados, en vigor desde enero de 2021, partida de fondos que servirá para financiar el presupuesto comunitario.
La tasa, que incluye un mecanismo de corrección para no penalizar a los Estados menos ricos, se calcula dos años después del año analizado para disponer de datos definitivos, de forma que los cargos de 2021 se conocerán en 2023.
El Tribunal de Cuentas Europeo señaló en 2020 en una auditoría que la UE necesita doblar su capacidad de reciclaje si quiere cumplir sus objetivos para 2030, y alertó de que se trata de una actividad en la que impera una falta de control que beneficia el tráfico ilegal y el lavado de dinero.

Guardar