Por Octav Ganea y Alexander Marrow
PLOIESTI, Rumania/MOSCÚ, 20 oct (Reuters) - Rusia cerrará sus lugares de trabajo durante una semana, Letonia volvió al confinamiento durante un mes y las funerarias rumanas se están quedando sin ataúdes, en momentos en que los países escépticos de las vacunas en Europa del Este enfrentan contagios y muertes sin precedentes producto del COVID-19.
Rusia, que se jactó de haber desarrollado una de las primeras vacunas contra la enfermedad, no ha podido persuadir a grandes sectores de la población para que la utilicen, y ahora se enfrenta a las tasas de mortalidad diarias más altas de la pandemia.
El presidente Vladimir Putin anunció el miércoles que el período comprendido entre el 30 de octubre y el 7 de noviembre serían "días no laborables", aunque se seguirían pagando los sueldos. Las regiones individuales podrían extender el cierre por más tiempo en respuesta a las condiciones locales.
La hostilidad pública a la vacunación ha afectado a otros países de Europa del Este que estaban dentro de la órbita de Moscú durante la Guerra Fría. Los estados de la Unión Europea con las tasas de vacunación más bajas forman parte del antiguo bloque comunista del este, incluidos Bulgaria, Rumania, Croacia, Polonia, Letonia y Estonia.
Rumania, donde una persona muere de COVID-19 cada cinco minutos, tuvo la tasa de mortalidad per cápita más alta del mundo esta semana, seguida de cerca por Bulgaria. Solo el 36% de los adultos rumanos están vacunados, en comparación con el 74% en toda la UE.
"Hubo familias que enterraron hasta cuatro personas en dos semanas, y eso no es fácil", dijo a Reuters Sebastian Cocos, propietario de una funeraria en la ciudad oriental de Ploiesti, agregando que tenía complicaciones para obtener suficientes ataúdes y así satisfacer la demanda. "Recomiendo a todos que se vacunen, de lo contrario terminarán en nuestras manos".
Andi Nodit, quien dirige el hospital de emergencias clínicas Bagdasar-Arseni de Bucarest, afirmó: "El tamaño y la gravedad de la situación en la sala de emergencias y el hospital están más allá de cualquier palabra que pueda expresar".
NUEVO PRIMER CONFINAMIENTO EN LA UE
Esta semana, Letonia impuso un confinamiento de un mes, convirtiéndose en el primer país de la UE en cerrar nuevamente desde que el bloque comenzó a reabrir las actividades este año después de que las vacunas estuvieron ampliamente disponibles.
Alrededor de un tercio de la población de Letonia habla ruso. Un estudio de SKDS encontró que solo el 46% de ellos estaban vacunados, en comparación con el 62% de los letones étnicos.
Bulgaria, donde solo una cuarta parte de la población ha recibido una primera dosis de la vacuna, prohibió el acceso a espacios públicos cerrados esta semana para cualquier persona que no pueda mostrar prueba de vacunación, un test negativo para la enfermedad o la recuperación de una infección reciente.
Las escuelas en áreas con altas tasas de infección deberán pasar a la enseñanza en línea.
"El número de nuevas infecciones y muertes está aumentando. Eso nos obliga a imponer medidas adicionales. Todas las actividades en interiores deben llevarse a cabo con un 'certificado verde'", dijo a periodistas el ministro de Salud interino, Stoicho Katsarov.
En tanto, el ministro de Salud de Polonia dijo el miércoles que podrían ser necesarias "medidas drásticas" para responder a un repentino aumento de infecciones en el país, aunque afirmó que no se estaba considerando un nuevo confinamiento.
"En los últimos dos días hemos visto una explosión de la pandemia", dijo Adam Niedzielski en una conferencia de prensa. "Tenemos incrementos de una semana a otra del 85% y más del 100%".
Mientras, el alcalde de Moscú anunció el martes que las personas mayores de 60 años que no fueron vacunadas deberán quedarse en casa durante cuatro meses. También la oficina del alcalde buscaba obligar a los centros comerciales a conectar sus cámaras de seguridad a un sistema de reconocimiento facial centralizado que permitiría a las autoridades hacer cumplir el uso de mascarillas en público, según el diario Kommersant.
(Reporte adicional de Andrius Sytas en Vilna, Alan Charlish y Pawel Florkiewicz en Varsovia, Tsvetelia Tsolova en Sofía, Luiza Ilie en Bucarest, Daria Korsunskaya en Moscú; Escrito por Peter Graff; Editado en Español por Manuel Farías)