Samsung ha presentado sus nuevos relojes inteligentes: el Galaxy Watch4 y el Galaxy Watch4 Classic permiten la medición de parámetros tales como grasa corporal, masa muscular, pulso e incluso presión sanguínea. De diseño clásico, ambos modelos son redondos con una pantalla OLED de fácil lectura. El Galaxy Watch 4, disponible con esfera de 40 y 44 milímetros, está diseñado para un funcionamiento puramente táctil y de deslizamiento, mientras que el 4 Classic (42 y 46 milímetros) también tiene un bisel giratorio para la navegación en menús. Además de la pantalla redonda, ambos modelos tienen dos interruptores para la navegación, el control por voz y Samsung Pay. El sistema operativo es resultado de la cooperación de Samsung con Google. La base es el sistema operativo Wear OS, de Google, pero el aspecto es 100 por ciento Samsung. Para emparejar los dispositivos con el móvil también es necesaria la aplicación Wearable, de Samsung. Los relojes también cuentan con memoria interna para las aplicaciones y la música: de los 16 gigabytes, quedan algo menos de ocho gigabytes disponibles una vez deducido el espacio para el software preinstalado. La configuración del Galaxy Watch 4 es rápida y sencilla. Sin embargo, la adaptación al uso diario individual lleva algo de tiempo y, en realidad, solo se puede realizar a través de la aplicación del móvil. La oferta de mosaicos es demasiado amplia, por lo que se recomienda hacer una buena selección para que el menú deslizable de selección rápida no se llene demasiado. La mayoría de las esferas preinstaladas son animadas y divertidas, y algunas ofrecen funciones adicionales de selección rápida, tales como el pronóstico del tiempo, un podómetro o programas de entrenamiento. Familiarizarse con el Galaxy Watch 4 lleva un poco de tiempo. Los mosaicos de selección rápida se recorren deslizando hacia la izquierda o derecha; un movimiento desde la parte superior abre un menú de ajustes, uno desde la parte inferior abre el menú de aplicaciones. Accionando el botón superior se retrocede en el menú, una pulsación larga abre el asistente de voz Bixby. Con el botón inferior se activa el servicio de pago de Samsung, Samsung Pay. Las aplicaciones de salud pueden medir toda una serie de datos vitales: pulso, presión arterial, ECG, oxígeno en sangre y composición corporal. Además, se obtiene información sobre el contenido de agua, el músculo esquelético, la grasa corporal, la masa muscular y el IMC. Todo esto se puede hacer colocando uno o dos dedos en los interruptores del reloj y quedándose quieto durante la medición. Para ello, el reloj utiliza varios sensores. El sensor óptico, por ejemplo, mide el pulso a través del reflejo de la luz, mientras que el biosensor de Samsung se utiliza para otros datos vitales. Entre otras cosas, determina la composición corporal enviando una pequeña corriente eléctrica. Para que la medición de la presión arterial funcione correctamente, el reloj debe calibrarse primero con un tensiómetro "real". El dispositivo también puede monitorizar el sueño. Todos los datos medidos son sincronizados con la aplicación Health de Samsung y clasificados directamente en una escala de colores. Esta permite ver rápidamente si hay demasiada grasa corporal, muy poca agua o muy poco músculo y, en teoría, reaccionar con un entrenamiento adecuado. Los datos de medición son sorprendentemente precisos. El Galaxy Watch 4 no se queda a la zaga en comparación con un pulsioxímetro de una tienda especializada: las mediciones de pulso y oxígeno en sangre son bastante precisas. Las mediciones de la presión arterial también son útiles una vez calibrado el dispositivo. Así y todo, se constataron ligeras desviaciones con respecto a un tradicional dispositivo de brazalete. Algo menos preciso es el recuento de pasos, ya que vibraciones o movimientos exagerados con el brazo hacen que los datos sean inexactos. El Galaxy Watch 4 también se puede utilizar en la piscina. Según Samsung, el dispositivo es resistente al agua dulce. Sin embargo, hay una restricción: la letra pequeña indica que es mejor no saltar con él al agua o realizar actividades de alta velocidad. Un punto a favor es que, al pasar del sistema operativo interno Tizen al Wear OS de Google, ahora ya no hay escasez de aplicaciones, sino una enorme gama de programas y esferas de reloj. Los relojes inteligentes de Samsung no funcionan con los iPhone. A la inversa, ya se sabe que este es el caso también con el Apple Watch, pero hasta ahora Samsung no había pretendido tanta exclusividad. Por otra parte, se han constatado también limitaciones con otros dispositivos Android. La medición de la presión arterial y el ECG solo funcionan con los móviles de Samsung. Con otros dispositivos, el reloj pide instalar la aplicación Samsung Health Monitor, que, sin embargo, solo está disponible en la Galaxy Store. A esta tienda, a su vez, solo pueden acceder los dispositivos Samsung. La integración de algunos servicios de Google también podría ser más fluida. La navegación con Google Maps en un recorrido en bicicleta, por ejemplo, no es posible, ya que se activa permanentemente el protector de pantalla. Si se trata de desbloquear la pantalla, la ruta desaparece. La duración de la batería es otra pequeña pega. Samsung promete algo menos de 40 horas de autonomía, lo que se alcanza sin dificultades si solo se usa el reloj como tal. Sin embargo, las funciones adicionales y las sesiones largas de entrenamiento consumen lógicamente mucha batería. Los Galaxy Watch 4 y 4 Classic son relojes elegantes e integran un sinnúmero de funciones prácticas. Aquellos usuarios que gustan de recopilar y evaluar muchos datos sobre su entrenamiento diario contarán para ello con una poderosa herramienta. Los Galaxy Watch 4 son cómodos de llevar, y su diseño de reloj clásico les otorga un aspecto atractivo. El sistema operativo Wear OS de Google pone a disposición muchas aplicaciones. Sin embargo, si no se tiene un móvil Samsung, se recomienda echar un vistazo a dispositivos de marcas rivales. Solo con un móvil Galaxy se puede explotar todo el potencial de la serie Galaxy Watch 4. El Galaxy Watch 4 estándar es más económico que el modelo Classic y tiene un diseño más delgado. dpa