SAN DIEGO (AP) —
Una corte federal de apelaciones eliminó el martes la prohibición de California a los centros privados de detención de inmigrantes.
El gobernador Gavin Newsom promulgó dicha prohibición en 2019, otra medida para restringir la cooperación de California con el gobierno federal en el tema de inmigración ante las políticas radicales impuestas por el entonces presidente Donald Trump. Según dicha ley, las prisiones privadas para inmigrantes debían ser eliminadas gradualmente para 2028.
Un panel dividido de tres jueces de la Corte de Apelaciones del 9no Circuito determinó que la prohibición, conforme a la propuesta 32 de la Asamblea (o AB 32), interfería con la autoridad del gobierno federal para hacer cumplir la ley.
“La AB 32 carece de sostén porque entra en conflicto con este poder federal y con la discrecionalidad otorgada al secretario (de Seguridad Nacional) en un terreno que continúa siendo ámbito exclusivo del gobierno federal, e impide al secretario hacer lo que la ley federal de inmigración explícitamente le permite”, escribió el juez Kenneth Lee, nombrado por Trump.
Lee tuvo el apoyo de Bridget Bade, jueza nombrada también por Trump. La jueza Mary Murguia, nombrada por el presidente Barack Obama, disintió.
El fallo constituye una victoria para compañías como The Geo Group Inc., —que demandó a Newsom—, y CoreCivic Inc., que dependen considerablemente de los contratos del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) y son parte crítica del sistema de detención de la agencia.
La corte devolvió el caso a la jueza federal Janis Sammartino, en San Diego, para mayor consideración después de anularle su fallo de que la ley se mantuviera en vigor durante la impugnación judicial.
El secretario de Justicia de California, Rob Bonta, que impulsó la ley que prohíbe los centros privados para la detención de inmigrantes cuando fue asambleísta estatal, dijo que la medida era importante para la salud y seguridad de todas las personas, y que, para él, la lucha era personal, porque llegó a Estados Unidos procedente de Filipinas cuando era niño.
“Aunque el camino hacia adelante parezca haberse alargado un poco más hoy, nuestro trabajo continúa y seguiremos avanzando”, señaló.
Cinco de los ocho centros de detención de inmigrantes del ICE en California están a cargo de compañías privadas.