Con payasos y un barco como apoyo, más de 200 activistas del movimiento ecologista Extinction Rebellion lanzaron este lunes una operación de bloqueo en el centro de Zúrich, capital financiera de Suiza, y amenazaron con repetirlo para hacerse oír.
El movimiento instó a sus militantes a protagonizar una sentada diaria, al medio día, en el extremo de tres puntos clave y bloquear así la circulación, como un puente y el cruce de la mayor vía comercial de la ciudad.
Este lunes, activistas de todas las edades, desde jóvenes estudiantes a jubilados comprometidos con la causa medioambiental, llegaron desde los cuatro rincones del país. Algunos incluso se tomaron una semana de vacaciones para hacerlo, decididos a repetir su protesta cada día.
A mediodía, los manifestantes, en pequeños grupos, se fueron colocando en sillas y desplegaron pancartas, mientras que otros se tumbaron sobre la calzada bajo grandes lonas de plástico azul, con la idea de representar un mar lleno de residuos.
Un grupo colocó un barco en medio de la calle. "Porque todos estamos en el mismo barco", explicó una activista, equipada con una mascarilla sanitaria con las siglas XR (del movimiento Extinction Rebellion) estampadas.
Según Extinction Rebellion, en el acto participaron unas doscientas personas, aunque en un principio los organizadores esperaban más de 300.
"Tenemos niños y estamos preocupados por su futuro", declaró Geneviève, una profesora de Neuchâtel, que acudió a la protesta con su marido, físico de profesión.
"Tenemos un poco de miedo de que nos detengan porque es la primera vez que participamos en un acto de desobediencia civil", comentaron, prefiriendo no comunicar su apellido, aunque matizaron que la causa climática bien merecía ese riesgo.
Tras haber cortado la circulación durante algo más de una hora, los activistas fueron evacuados poco a poco por la policía.
Los agentes detuvieron a 134 personas para efectuar controles, indicó en un comunicado.
En junio, el movimiento ecologista envió una petición al Consejo Federal (el gobierno suizo) reclamándole que reconozca "oficialmente" la emergencia climática y ecológica y que actúe inmediatamente, convocando "una asamblea ciudadana sobre la justicia climática y ecológica".
Extinction Rebellion advirtió que "sin una respuesta adecuada de su parte", los activistas estaban dispuestos a llevar a cabo una acción de desobediencia civil.
El movimiento ecologista ha llevado a cabo varias acciones en Suiza desde su creación, en 2018. En 2019 coloreó en verde fluorescente el Limmat, el río que cruza Zúrich.
noo/vog/sr/rjm/lpt/jvb/meb