Turistas espaciales terminan su viaje orbital con acuatizaje

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CABO CAÑAVERAL, Florida, EE.UU. (AP) — Cuatro turistas espaciales terminaron exitosamente su viaje a la órbita terrestre el sábado con un acuatizaje en el océano Atlántico frente a las costas de Florida.

Su cápsula SpaceX abrió el paracaídas antes de caer al océano justo previo al atardecer, no lejos del lugar donde iniciaron su vuelo hace tres días.

La tripulación novata fue la primera en dar la vuelta al mundo sin contar con un astronauta profesional.

El multimillonario que pagó una cifra millonaria no revelada por su viaje y el de sus tres invitados deseaba mostrar que la gente común y corriente podía llegar a la órbita, y el fundador de SpaceX, Elon Musk, los llevó como los primeros turistas lanzados por la compañía.

“Su misión ha mostrado al mundo que el espacio es para todos nosotros”, dijo por radio el Control de la Misión de SpaceX.

“Fue un paseo fabuloso para nosotros... apenas acaba de empezar”, respondió el patrocinador del viaje, Jared Isaacman, en referencia a vuelos privados próximos.

La cápsula Dragon totalmente automatizada de SpaceX alcanzó una altitud inusualmente elevada de 585 kilómetros (363 millas) después de despegar el miércoles en la noche. Los pasajeros, que rebasaron en 160 kilómetros (100 millas) la altitud de la Estación Espacial Internacional, disfrutaron vistas de la Tierra desde una gran ventana en forma de burbuja en la parte superior de la cápsula.

Los cuatro regresaron tras penetrar la atmósfera el sábado en la tarde para convertirse en los primeros viajeros espaciales que ponen fin a su vuelo en el Atlántico desde que el Apolo 9 lo hizo en 1969. Las dos tripulaciones anteriores de SpaceX —astronautas de la NASA— acuatizaron en el golfo de México.

En cuestión de minutos, un par de embarcaciones de SpaceX se acercaron a la cápsula que se movía en el agua. Cuando la escotilla de la cápsula se abrió en el barco de recuperación, la trabajadora sanitaria Hayley Arceneaux fue la primera en salir; tenía una enorme sonrisa y levantaba sus pulgares hacia arriba.

Todos parecían estar bien y contentos.

Después, los viajeros fueron trasladados en helicóptero a la costa para que se encontraran con sus familias en el Centro Espacial Kennedy de la NASA, de donde habían despegado el miércoles en la noche.

Esta vez, la NASA fue poco más que una entusiasta animadora porque su único vínculo con la plataforma de lanzamiento Kennedy es que alguna vez la utilizó para los viajes de la misión Apolo a la Luna y de las tripulaciones del transbordador pero que ahora está arrendada por SpaceX .

Isaacman, de 38 años, empresario y consumado piloto, se había propuesto recaudar 200 millones de dólares para el Hospital Pediátrico de Investigaciones St. Jude. Tras donar él mismo 100 millones de dólares efectuó una lotería para uno de los cuatro lugares. También efectuó un concurso para clientes de su negocio de procesamiento de pagos Shift4 Payments en Allentown, Pensilvania.

Entre quienes lo acompañaron en el vuelo espacial estaba Arceneaux, de 29 años, una auxiliar médico que fue atendida de cáncer de hueso hace casi dos décadas en el hospital, en Memphis, Tennessee, y los ganadores del concurso Chris Sembroski, de 42 años, ingeniero de datos en Everett, Washington, y Sian Proctor, de 51, maestra en un colegio comunitario, científica y artista en Tempe, Arizona.

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