MADRID (AP) — Al Barcelona le espera un periodo muy turbulento de adaptación en la era post Lionel Messi.
Y ello quedó manifiesto tras la debacle 3-0 como local ante el Bayern Múnich en la Liga de Campeones el martes, la primera derrota que sufren desde que Messi tuvo que marcharse por el marasmo financiero del club catalán
“Es lo que hay, somos lo que somos ahora”, sintetizó el capitán Gerard Piqué luego de un partido en el que los azulgranas fueron vapuleados de principio a fin en el Camp Nou. “Es un año complicado".
Sombra del equipo que encandilaba con Messi en la cancha, el Barcelona ni siquiera pudo ensayar un remate a puerta en todo el partido y se encontró bajo un asedio permanente del Bayern.
“Es lo que hay en estos momentos”, dijo resignado el técnico Ronald Koeman, escudándose en las ausencias de los lesionados delanteros Ansu Fati y Ousmane Dembélé. “No quiero buscar excusas, pero todo el mundo sabe perfectamente qué había disponible, sobre todo en la parte de ataque. Hay que aceptar lo que hay y trabajar”, afirmó.
El nuevo estrépito se produjo a algo más de un año de la bochornosa derrota 8-2 contra el mismo Bayern en los cuartos de final de la Liga de Campeones de 2020, el revés que desnudó por completo las falencias del Barça.
“Pobre Barça", tituló el diario deportivo Marca en su portada del miércoles. “La Triste Realidad”, rotuló Sport, deportivo de la ciudad de Barcelona.
Koeman, quien fue contratado poco después de la paliza sufrida ante el Bayern, sostuvo que al Barcelona le tomará bastante tiempo volver al máximo nivel.
“Nosotros tenemos muchos jugadores jóvenes que dentro de dos o tres años van a ser mejores. Es dificilísimo de aceptar, pero esperar a mejorar cosas y que la gente mejore de sus lesiones”, dijo.
Koeman también perdió a Antoine Griezmann en la ventana de transferencias el mes pasado, una en la que el atacante holandés Memphis Depay fue el refuerzo más destacado. También adquirieron a Sergio Agüero, pero el veterano delantero argentino es uno de varios jugadores que se recuperan de lesiones, junto a Dembélé, Fati y Sergiño Dest.
El martes, Koeman abrió las puertas del primer equipo a dos adolescentes: Yusuf Demir, extremo de 18 años, y Gavi, volante de 18. El mediocampista Pedri González, también de 18 años, fue titular.
“Me quedo con que han entrado chavales de 18 años”, dijo Piqué. “Es la realidad”.
Al Barcelona no le quedará otra que depender de su cantera para capear el desastre de sus finanzas por culpa de la pandemia y la mala gestión de previas directivas. No pudieron ofrecerle un nuevo contrato a Messi y el crack argentino se marchó al Paris Saint-Germain.
El presidente azulgrana Joan Laporta rogó a la afición seguir alentando al club al admitir que necesitará tiempo para enderezar el rumbo.
“Estoy tan dolido e indignado como todos vosotros”, dijo Laporta en un videomensaje el miércoles. "Les digo que lo que está pasando es uno de los escenarios que contemplábamos. Y les pido paciencia. Paciencia y que sigáis dando apoyo al equipo”.
El pesimismo cunde desde hace rato entre los hinchas del Barcelona. No se agotaron todas las entradas que se pusieron a la venta para el partido del martes, algo que rara vez ocurrió con Messi y menos en un partido de envergadura por la Champions.
Piqué dijo que le dolió mucho que la afición del Camp Nou abucheara a Sergi Roberto, señalado por su flojo rendimiento como lateral por derecha: "Me gustaría recordar a la gente que no es lateral, es interior. Hace el sacrificio y duele muchísimo”.
Para empeorar las cosas, Pedri y Jordi Alba sufrieron lesiones musculares durante el partido y podrían estar fuera de actividad durante cierto tiempo.
Piqué señaló que la prioridad en las próximas semanas será mantenerse a flote tanto en el torneo doméstico como en Europa.
“Si hay que ser francos, hoy no estaremos entre los favoritos. Tampoco pasa nada por no serlo", dijo Piqué sobre el panorama en la Champions, evocando el repunte que llevó al Chelsea inglés al título en la pasada edición.
“Muchas veces lo hemos sido y no lo hemos conseguido. El año pasado, ¿quién daba de favorito al Chelsea? Nadie. El fútbol cambia muy rápido, son estados de ánimo”, añadió el central.
El próximo compromiso del Barcelona en el Grupo E será una visita a Benfica a fines de este mes. Benfica debutó con un empate 1-1 en el feudo del Dínamo de Kiev.