La idea de empaquetar el Arco del Triunfo en París se remonta a unos 60 años atrás. El espectacular proyecto fue concebido por el dúo de artistas Christo (1935-2020) y su esposa Jeanne-Claude (1935-2009), quienes no podrán ver cómo este embalaje finalmente se hará realidad en estos días en la capital francesa. Entre altas grúas y un impresionante andamiaje de acero, tres equipos trabajan actualmente a contrarreloj para concretar la espectacular envoltura de uno de los monumentos más famosos de París. Porque aún antes de la inauguración oficial, prevista para el 18 de septiembre, los preparativos ya convocaron a un gran número de curiosos. El proyecto fue planeado durante décadas por Christo y Jeanne-Claude. Tras la muerte de su mujer nacida en Marruecos, Christo siguió adelante solo, aunque ya tampoco podrá vivir la concreción de la iniciativa. El belga, famoso por envolver entre otros el edificio del Reichstag en Berlín, falleció el 31 de mayo de 2020 en Nueva York, a los 84 años. Los cuatro grupos escultóricos principales en cada uno de los pilares del arco, "Le Départ de 1792", "Le Triomphe de 1810", "La Résistance de 1814", "La Paix de 1815" fueron envueltos por una rejilla de acero que protegerá estos relieves. Según comentó Bruno Cordeau, el administrador del Arco del Triunfo, en declaraciones a la emisora "France Inter", el material con el que se embala el monumento histórico no debe dañarlo. Una gigantesca malla metálica también protege el arco abovedado de más de 29 metros de altura de uno de los edificios históricos más emblemáticos de la ciudad. El monumento, construido entre 1806 y 1836 por orden del emperador Napoleón I tras la batalla de Austerlitz en 1805 para glorificar sus victorias militares, está situado en el medio de la céntrica Plaza Charles de Gaulle, hasta 1970 oficialmente denominada Place de l’Étoile. Con la tumba del soldado desconocido de la Primera Guerra Mundial y su llama encendida mantenida a diario, el Arco del Triunfo se cuenta entre los íconos de la capital francesa. Allí se suceden normalmente conmemoraciones y se depositan ofrendas florales, como el 11 de noviembre, el aniversario del Armisticio de 1918 entre Francia y Alemania. El sobrino de Christo, Vladimir Javacheff, le explicó al diario "Le Parisien" que, para concretar la envoltura del Arco del Triunfo, se requirió dar muchos pasos. Javacheff señaló que la parte que más tiempo consume, y asimismo la más importante, es la protección del edificio. Para la etapa más espectacular, la del envoltorio, detalló que solamente se necesitaba una semana. El proyecto se remonta a los inicios de la década de 1960. Christo y su mujer Jeanne-Claude comenzaron por entonces a realizar trabajos temporarios interviniendo el espacio público. Y por entonces también surgió la idea de empaquetar el Arco del Triunfo. Entre 1962 y 1963, Christo produjo un fotomontaje del empaquetado, mientras que en 1988 realizó un collage y continuó desarrollando el proyecto en 2017. En 1985, Christo y Jeanne-Claude ya habían envuelto el Pont Neuf, el puente más antiguo de los que cruzan el Sena en París. Para cumplir los deseos de Christo, Vladimir Javacheff asumió la dirección del último proyecto de su tío. Según le explicó a la emisora "France Inter", todo fue decidido en vida del artista, incluyendo los detalles. Por lo tanto, indicó, lo único que deben hacer es seguir sus borradores y bocetos. Al igual que todos los proyectos de Christo, esta costosa obra se autofinancia. Los alrededor de 14 millones de euros (unos 16,55 millones de dólares) se obtuvieron a partir de la venta de collages, dibujos preliminares, maquetas y litografías. La instalación de los 25.000 metros cuadrados de red plástica y cuerda quedó para la semana previa a la inauguración. El tejido reciclable de color plateado azulado fue fabricado por una empresa alemana, con sede en la ciudad de Lübeck. En la fase final el material fue fijado con una cuerda de polipropileno de 3.000 metros de longitud, que también es reciclable. Antes de la crisis a causa del coronavirus, el Arco del Triunfo se contaba entre los monumentos más visitados de Francia, con alrededor de 1,7 millones de personas al año. Durante toda la fase de preparación, el monumento -desde el cual se obtiene una magnífica vista panorámica sobre los Campos Elíseos y la ciudad- permanece abierto. Y, desde el 18 de septiembre hasta el 3 de octubre, podrá admirarse la obra póstuma de Christo en todo su esplendor.